La hermana de la mujer asesinada a manos de su novio en Valladolid: «Paloma pensó en dejarle, pero él tenía problemas con el alcohol y las drogas»

El primer caso de violencia de género en Valladolid ha estremecido a toda la sociedad con el asesinato de Paloma e India, madre e hija que residían en un bloque de viviendas en el Paseo Zorrilla. Ambas perdieron la vida a manos de David M., la pareja sentimental de la progenitora y quien aun permanece ingresado en el Hospital Clínico por sus autolesiones con arma blanca por un intento de suicido tras el doble crimen producido en la madrugada de este lunes 23 de enero. Este atroz episodio violento ha dejado helado a toda la ciudad vallisoletana, y especialmente a los familiares de las víctimas quienes en las últimas horas claman justicia llenos de rabia contra el autor de esta barbarie machista.

La hermana de Paloma y tía de India, María Pinedo, ha hecho unas duras declaraciones por el terrible asesinato y no tiene palabras para describir ahora mismo los sentimientos de toda la familia. «Estamos desgarrados, ha matado a mi hermana a sangre fría, a puñaladas, y a mi sobrina que no tenía culpa de nada», ha llorado la hermana de la fallecida en una entrevista en Telecinco junto al Tanatorio San José donde tiene lugar la capilla ardiente de las dos mujeres asesinadas. María ha descrito a su hermana como una persona espectacular, trabajadora y estable y lamenta que «sabíamos que este hombre tenía problemas -en referencia al presunto asesino-, y avisamos a mi hermana diciéndola que no nos llegaban buenos comentarios de esta persona».

En este sentido, María reconoce abiertamente que su hermana sabía que su pareja sentimental tenía «problemas con el alcohol y las drogas» porque según cuenta la familiar, Paloma estaba ayudando a David con tratamientos para que dejara estas adicciones. «Mi hermana vivía con la niña y él entró en su vida, y a pesar de que le advertía, ella me decía que le quería y todo lo hacía para ayudarle. Mira donde ha acabado, en el tanatorio», se muestra desconsolada.

David M., de 44 años y natural de Tudela de Duero, tenía antecedentes por violencia de género sobre una pareja anterior en 2017, un pasado que la familia de Paloma desconocía ya que María Pinedo explica que «nos llegaban comentarios sobre él acerca de que era un chico de la noche y que tenía problemas con las drogas, pero de los malos tratos no sabíamos nada». Precisamente, la hermana de Paloma confiesa que «nunca» vio a la víctima marcas o golpes que pudieran desvelar algún tipo de maltrato, y aunque según señalan desde el entorno de las víctimas, David no era un hombre violento físicamente, sí que tenía actitudes violentas.

«Paloma pensó en dejarle muchas veces porque intentaba ayudarle con el tratamiento del alcohol y éste a veces no le hacía caso y ella se frustraba. Decía que no podía más pero ella quería ayudarle porque le quería», cuenta rota de dolor María Pinedo. Sumado a ello, la familiar -como hizo en sus redes sociales- mostró a través de la televisión la fotografía con el rostro del supuesto asesino de su hermana y sobrina, «muestro su foto, se llama David Maroto, que se vea en todos los sitios, nos ha hundido la vida y se ha llevado a las dos personas más importantes de mi vida», concluye.

A la espera de su evolución médica, David M. pasará en las próximas horas a disposición judicial con una declaración previa a la Policía, y posteriormente al juez, sobre los hechos por los que se le ha detenido, el doble asesinato machista que él mismo confesó a su cuñado a través de una llamada telefónica a las 03.12 horas de la mañana del lunes, aunque ante los agentes policiales no ha reconocido nada.