Un fatal atropello se cobró la vida de la joven ciclista vallisoletana Estela Domínguez el pasado jueves 9 de febrero. Desde entonces la vida de su familia se paró en seco dejando una gran ausencia que jamás volverán a recuperar. A sus 19 años, Estela Domínguez contaba ya con varios reconocimientos en el mundo del ciclismo, de la mano siempre de su padre, el también corredor profesional aunque ya retirado Juan Carlos Domínguez, a quien ella seguía los pasos. Los familiares de Estela Domínguez le dieron su último adiós en un multitudinario funeral en Íscar, su pueblo natal, aunque contaron con diferentes homenajes en recuerdo y memoria de la joven en Arroyo de la Encomienda o Salamanca.
En las últimas horas, el ciclista vallisoletano Juan Carlos Domínguez ha despedido públicamente a su hija Estela con una emotiva dedicatoria a ella y a todos aquellos que han sentido su pérdida compartiendo el dolor de una familia rota. El deportista ha pronunciado un pequeño extracto de su pensamiento, que hoy y siempre estará empañado por un trágico accidente de tráfico que obligó a despedirse de su hija con impotencia y tristeza.
«Nunca he utilizado las redes sociales para publicar noticias de mi vida privada, pero mi mujer y yo necesitamos trasmitir este mensaje de agradecimiento a todas las personas que nos han acompañado en estos días tan difíciles y duros para nosotros y nuestra familia», así comenzaba Domínguez a través de su perfil social. «Este gran apoyo es lo que nos da el consuelo de que nos habéis demostrado lo que queríais a nuestra hija, nos llena de orgullo saber que Estela, nuestra niña, nuestro tesoro, nuestra vida también ha dejado huella en todos vosotros, que habéis estado y acompañado con vuestra presencia cuando ella posaba en lo más alto del pódium, rodeada de infinidad de flores, ganando el cielo», manifestaba el padre de la joven ciclista iscariense sacando fuerzas para describir este duro episodio.
La familia de Estela Domínguez señala también que «nos han arrebatado su vida y la nuestra, un daño irreparable, nada nos calma, no hay esperanza, ni hay una segunda oportunidad. Nadie se merece esto». La joven perdía la vida en el acto después de ser arrollada por un camión en las inmediaciones del polígono industrial de Villares de la Reina en Salamanca mientras entrenaba con su bicicleta. La Guardia Civil investiga el fatal siniestro vial a causa de una «distracción» o un «deslumbramiento» del conductor cuando circulaba por lo que, asegura que no vio a la ciclista. La última novedad del caso es que el camionero responsable, del que no han trascendido datos, estaría acusado de un homicidio imprudente.
Asimismo, el padre de Estela ha descrito a su hija como «una niña ejemplar, responsable y con un gran corazón». «Esperamos que desde el cielo nos ayude a curar este inmenso dolor y que su recuerdo no nos torture», concluyó Juan Carlos Domínguez en su despedida. El ciclismo español se volcó desde el primer momento con la familia de Estela Domínguez con mensajes de condolencias y en señal de duelo. Reconocidos ciclistas como Eric Mas, Alejandro Valverde u Óscar Peleteiro se sumaron al pésame por el fallecimiento de una joven promesa que vio como su vida se cortaba para siempre disfrutando de su pasión, el ciclismo.