El caso Esther López se extenderá al menos hasta principios de 2024 para esclarecer lo que ocurrió a la joven de Traspinedo aquella madrugada del 13 de enero de 2022. El Juzgado de Instrucción número 5 de Valladolid, que investiga su desaparición y muerte, ha acordado ampliar el plazo de instrucción seis meses más, a la espera de recibir el resultado final de las diligencias acordadas por parte de la Guardia Civil. De este modo, la jueza Soledad Ortega acepta la petición de la Fiscalía de prolongar la investigación, un semestre más con el visto bueno de las partes a excepción de la defensa del principal investigado, Óscar S.M.
Según consta en el auto al que ha tenido acceso Valladolid Plural, que ya ha sido notificado este viernes a las partes implicadas, «falta por recibir el resultado de las diligencias de investigación pendientes, el auto del 26 de enero de 2023, y el informe final de los agentes de la Guardia Civil, diligencias de investigación de las que se podría derivar la necesidad de practicar otras nuevas determinantes para la correcta calificación jurídico penal de los hechos objeto de investigación».
La abogada del principal sospechoso de terminar con la vida de la joven de Traspinedo ya respondió en su día a la petición de prórroga con la solicitud del sobreseimiento de las actuaciones al advertir de que «no hay prueba alguna contra él» y apuntaba a que ni siquiera se ha podido determinar si hay delito o un mero accidente en el caso de Esther López de la Rosa. Todo ello, en un marco, a juicio de la defensa de Óscar S., en una persecución e incriminación por parte de la Guardia Civil contra él, al tiempo que consideran que la Benemérita ha abandona «cualquier otra línea de la investigación» que no sea contra él.
La Guardia Civil podrá continuar sus labores de investigación que viene realizando desde enero del pasado año para esclarecer la desaparición y muerte de la joven de Traspinedo. En el informe final que espera de manera urgente la magistrada encargada del caso, está por conocer las respuestas de los últimos indicios descubiertos que apuntan al amigo de la víctima, Óscar S., como el lavado de su coche en una estación de Valladolid horas después de la desaparición de Esther, el borrado de la centralita de su turismo, un Volkswagen T-Roc, y la ubicación que le sitúa en las inmediaciones de la cuneta donde fue hallado el cuerpo de la joven días antes de la localización del mismo.
También queda pendiente por conocer la persona que ayudó presuntamente a Óscar S.M. a realizar los borrados de los datos de su coche, puesto que la Guardia Civil en su inspección determinó que dichas eliminaciones se habían llevado a cabo por un profesional en la materia. Asimismo, se espera que el teléfono habitual del investigado esclarezca algunas pruebas más sobre sus movimientos en la noche en la que desapareció y murió Esther así como los días posteriores, a pesar de que otro terminal en desuso que localizaron en su casa, no aportó ninguna información en el volcado de datos puesto que el teléfono estaba reseteado de fábrica.
Por otra parte, la familia de Esther López de la Rosa mantiene su acusación hacia Óscar en todas las comparecencias y actos públicos clamando justicia por su hija y hermana. Se refieren a él como un «lobo con piel de cordero» y en numerosas ocasiones han asegurado que ya le queda «poco tiempo» para que se esclarezca todo y se descubra lo que realmente ocurrió a principios de 2022 con la joven de Traspinedo.
