La familia de Teresa Rodríguez Llamazares, la joven vallisoletana de 23 años asesinada a manos de su exnovio en Bruselas, ha regresado este lunes 1 de noviembre a la capital vallisoletana, seis días después del crimen. Tal y como ha explicado la delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, los familiares de la enfermera, una vez que han concluido los trámites y las gestiones administrativas, han «regresado ya a Valladolid».
Una de las cuestiones pendientes que en la Delegación del Gobierno no podían concretar y que se limitaban a contestar que la repatriación del cadáver de Teresa correspondía a las autoridades belgas, finalmente no hizo falta porque la familia eligió incinerar el cuerpo de la joven. Barcones ha relatado que la familia ha vuelto a Valladolid, «con los restos» en el día de ayer. En este sentido, agradeció, el trabajo de la subdelegada del Gobierno en Valladolid, Alicia Villar, que estos días ha estado en contacto con el Consulado para «garantizar» que la familia recibiera la asistencia que fuera necesaria en «todos los órdenes», tal y como ha reconocido durante la inauguración de la jornada ‘La Lectura en el Mundo Rural’ en la localidad de Urueña.
Del crimen machista Teresa Rodríguez poco más se sabe después del comunicado que la Fiscalía emitió el viernes por la tarde para informar que la joven de 23 años fue encontrada muerta, a consecuencia de las heridas de un arma blanca, sobre las 08.30 horas en un apartamento de Ru du Midi en Bruselas. El sospechoso es un joven de 24 años que apareció herido grave tras tirarse por la ventana de la misma vivienda, y expareja de la fallecida. La Policía belga, tras el hallazgo del cuerpo sin vida de Teresa, se puso en contacto a través de la INTERPOL con la Policía Nacional de Valladolid para tratar de localizar a los familiares de la víctima. Poco después se comunicó que el presunto autor del asesinato era procedente también de Valladolid, C.A.G, un guardia civil en prácticas en Portillo que fue detenido en el lugar y se encuentra ingresado en estado crítico en un hospital de Bruselas.