El alcalde de Matapozuelos, Conrado Íscar, ha sido reelegido como presidente de la Diputación de Valladolid por segundo mandato tras el Pleno de Constitución de la institución provincial. Íscar ha tomado posesión del bastón de la provincia vallisoletana por mayoría absoluta en un abarrotado Palacio de Pimentel y en el que ha jurado su cargo para comenzar su segundo mandato como un «libro blanco que está por llenar». El ya de nuevo presidente de la Diputación de Valladolid ha recibido el aplauso de todos los diputados provinciales, y en especial de sus 13 compañeros del Partido Popular que conformarán el Gobierno provincial.
La Sesión Constitutiva de la nueva Corporación provincial se ha celebrado en la mañana de este jueves 29 de junio, como resultado de las elecciones municipales del 28-M. La constitución de la mesa de edad, presidida por los diputados de mayor edad, Julio Pereda Alquegui, concejal de Tudela de Duero por IU y de menor edad, Yolanda Burgoa Durán, edil de Peñafiel por el PP, se procedió a la toma de posesión de los 27 miembros de la nueva Corporación y, posteriormente a la elección del nuevo presidente. Con 14 votos, Conrado Íscar ha sido reelegido presidente de la Diputación de Valladolid en primera votación al obtener mayoría absoluta. La nueva Corporación Provincial está integrada, además, por 10 diputados del Partido Socialista, 2 diputados de Vox y 1 diputado de Valladolid Toma la Palabra.
En su discurso de toma de posesión, el regidor de Matapozuelos ha agradecido el apoyo de los vecinos de la provincia y ha asegurado asumir de nuevo la presidencia de la Diputación «con un poco más de experiencia adquirida durante estos últimos cuatro años, pero con la misma ilusión que el primer día». Íscar se ha referido a las dificultades de estos cuatro años del mandato anterior con «circunstancias muy adversas que nos han exigido un especial esfuerzo para estar al lado de los ciudadanos, pero que también han servido para demostrar que somos capaces de anteponer los intereses de la provincia a las discrepancias políticas», y en este sentido ha agradecido de manera especial el trabajo de los empleados públicos de la institución, que «cumplieron con creces su cometido», y de todos los grupos políticos.
Conrado Íscar ha señalado que hoy se inicia un nuevo mandato que abre «un futuro ilusionante» en el que «el diálogo con todos y la búsqueda del consenso, la colaboración y la cooperación seguirán marcando la forma de hacer de este nuevo equipo de Gobierno». El presidente provincial ha invitado de nuevo a todos los grupos políticos a que, «si lo desean, formen parte de la Junta de Gobierno, tal y como ha sucedido en el mandato que acabamos de finalizar». Conrado Íscar ha destacado los cinco ejes en los que se va centrar su Gobierno en el nuevo mandato que acaba de comenzar, como son la lucha contra el reto demográfico, el mantenimiento del compromiso con la defensa de los servicios sociales, el reforzamiento de la cooperación económica y administrativa con los ayuntamientos de la provincia, el apoyo e impulso decidido de la actividad económica y la generación de empleo, y el compromiso con el medio ambiente.
Asimismo, el nuevo presidente de la Diputación de Valladolid ha señalado sus compromisos prioritarios como la puesta en marcha de un plan para fijar población; el mantenimiento de los recursos necesarios para mantener los servicios sociales en el mundo rural, con atención especial a los mayores, las personas con discapacidad, las medidas de conciliación, los jóvenes y las políticas de igualdad; la reducción de tasas y precios públicos a los ayuntamientos, así como la simplificación administrativa; la apuesta por el sector primario y agroalimentario; el fortalecimiento de la Mesa del Diálogo Social de la provincia de Valladolid; la búsqueda de financiación europea para construir un nuevo CTR en la provincia; o la apuesta por la celebración del V Centenario del Nacimiento de Felipe II en el Palacio de Pimentel.
En su inicio de mandato, Íscar ha manifestado que serán «reivindicativos» y «exigentes» para lograr una financiación local «adecuada y suficiente»; la «rápida» ejecución de los proyectos e infraestructuras de la provincia «olvidados durante años», una conectividad y cobertura móvil «de calidad» en todo el territorio; la estabilidad y cobertura de las plazas de secretarios e interventores y una «mayor» financiación para las competencias delegadas o impropias. Por ello, el presidente de la provincia de Valladolid ha denominado a su segundo mandato como «un libro en blanco que está por llenar» y ha pedido a todos los diputados provinciales que unan «experiencia e ilusión para ser capaces de cumplir las expectativas que han depositado en nosotros nuestros vecinos, cada uno desde la posición que nos corresponda, pero todos con el mismo objetivo, que es no defraudar a quienes nos han elegido».
Desde su «profunda fe cristiana», Conrado Íscar pidió a Dios que le brinde la «templanza», el «carácter» y la «sabiduría necesaria» para dirigir la Diputación de Valladolid, un reto que asume «lleno de esperanza e ilusión» y con la disposición de cumplir con las «líneas maestras» de su programa para todos y cada uno de los vallisoletanos que apuestan por su proyecto de vida en el medio rural. Entre las diferentes personalidades que se acercaron al Palacio de Pimentel para asistir a la toma de posesión del presidente provincial se encontraron el consejero de Presidencia de la Junta de Castilla y León, Luis Miguel González Gago; la consejera de Movilidad, María González Corral; el presidente de las Cortes, Carlos Pollán; la teniente de alcalde del Ayuntamiento de Valladolid, Irene Carvajal; la delegada territorial en la Junta, Raquel Alonso; o la subdelegada del Gobierno en Valladolid, Alicia Villar.
