Una fuga de gas previa pudo ser el origen de la explosión de la calle Juan de Valladolid en Parquesol

Valladolid ha amanecido de nuevo, desgraciadamente, con el corazón en un puño al sufrir otra explosión de gas. En esta ocasión se ha originado en una vivienda de la calle Juan de Valladolid, en el barrio de Parquesol, donde reside la persona que ha resultado herida con quemaduras graves. La tragedia de la calle Goya, en apenas un mes, vuelve a sacudir a todos los vallisoletanos con un episodio similar, aunque por suerte, ahora no hay que lamentar víctimas mortales. La deflagración se produjo en la madrugada de este martes 29 de agosto, alrededor de las 06.00 horas, y el estallido se ha escuchado también desde diferentes partes de la capital vallisoletana y el humo a alertado rápidamente en la zona.

Por el momento, las causas de la explosión de gas no se conocen con precisión, pero tal y como explica el jefe del Servicio de Bomberos de Valladolid, Javier Reinoso, que se ha desplazado a lugar junto al alcalde Jesús Julio Carnero, las primeras hipótesis apuntan a una fuga de gas previa que pudo originar la detonación al encender la cocina o por una chispa eléctrica. Esta nueva desgracia, aunque sin personas fallecidas, y que deja trece heridos ha inquietado a Valladolid al sufrir otra «fatalidad» en menos de un mes, tras la trágica explosión de la calle Goya el pasado 1 de agosto, donde Teresa B. de 53 años perdió la vida.

Todavía con muchos de los vecinos afectados de la calle Goya realojados en hoteles y pisos de familiares, al seguir con los estudios de urbanismo y policiales por la deflagración en el inmueble, el Ayuntamiento de Valladolid ha decidido activar el mismo protocolo para las personas residentes en el bloque 23 de la calle Juan de Valladolid, en Parquesol. El alcalde Jesús Julio Carnero ha lamentado el suceso de esta madrugada, sobre todo porque «en menos de un mes asistimos en Valladolid a una explosión de gas, y hace 28 días estábamos en la calle Goya».

Un total de 12 personas han resultado heridas leves, y otra muy grave, el residente del 3ºI que ha sido el piso del origen de la explosión. El varón de 57 años residía solo en la vivienda siniestrada y según las primeras informaciones, al levantarse temprano, quizá al encender la cocina para elaborar el desayuno o simplemente una chispa accidental pudo originar la deflagración saltando por los aires el domicilio, y afectando a otras viviendas del inmueble, aunque afortunadamente, sin daños estructurales. El hombre ha resultado herido de gravedad, por quemaduras, y se encuentra ingresado con pronóstico reservado. Tras su traslado en UME al Hospital Universitario Río Hortega ha sido hospitalizado en la Unidad de Quemados. También, varias personas han resultado intoxicadas por inhalación de humo, y dos bebés han sido atendidos en el hospital de campaña instalado en el lugar de los hechos, aunque afortunadamente, ya han recibido el alta.

Desde el Ayuntamiento de Valladolid aclaran que el edificio en el que se ha producido el siniestro ha sido desalojado por completo a largo de esta mañana, a pesar de que algunas de las casas no han resultado dañadas. El bloque afectado por la explosión consta de 37 viviendas distribuidas a razón de cinco por cada planta, excepto el 8º que tiene dos. La deflagración también ha dañado al edificio de enfrente, con roturas de cristales en cuatro viviendas, así como a cinco vehículos que estaban aparcados en la zona. Los vecinos tanto del bloque siniestrado como de otras zonas del barrio se encuentran en estado de shock al sufrir de cerca esta desgracia, que azota de nuevo a la ciudad de Valladolid, aún con el susto en el cuerpo por lo ocurrido durante la noche del 1 de agosto en el barrio de La Farola.

Los residentes del portal 23 de la calle Juan de Valladolid contarán con ayuda psicológica así como una solución de alojamiento en hoteles de la ciudad, en el caso de que no puedan regresar a sus hogares. La Concejalía de Personas Mayores, Familia y Servicios Sociales ha puesto a disposición de los afectados una psicóloga y tres trabajadoras sociales que les proporcionarán apoyo en función de sus necesidades ante la tragedia que les ha tocado vivir en la madrugada de este martes 29 de agosto.