SMS, tickets y regalos de cumpleaños: las pruebas que presenta Óscar para negar el borrado de la centralita de su coche en el caso de Traspinedo

Las últimas informaciones del caso Traspinedo que apuntan de nuevo a Óscar S.M. como responsable de la desaparición y muerte de Esther López han hecho que el propio sospechoso haya tenido que defenderse volviendo a negar que él manipulara y borrara la centralita de averías de su coche. Una respuesta que ya dio a la jueza de Instrucción número de 5 de Valladolid cuando compareció el pasado 25 de abril asegurando que él no había borrado nada porque no sabía hacerlo y negando que hubiera llamado a alguien para que lo hiciera.

En este sentido, el último informe de la Guardia Civil reflejaba que la centralita del investigado, un vehículo Volkswagen T-Roc, sufrió dos borrados y uno de ellos pudo ser realizado por un experto tecnológico. Concretamente, las fechas coinciden con el 1 de febrero y 4 de abril. Ante estos nuevos indicios que le acusan directamente como implicado en el crimen de Esther López, Óscar ha presentado un escrito ante la jueza Soledad Ortega para rechazar su autoría en la manipulación de la centralita del vehículo.

En dicho documento, se puede apreciar que el investigado se desmarca de cualquier tipo de borrado de datos y averías de su coche y también que alguien con altos conocimientos de LA electrónica del automóvil participara en la manipulación. Una de las novedades en la investigación es que el primer borrado y el intento de codificación de una nueva llave se produjo a las 13.54 horas del 1 de febrero aunque Óscar sostiene que ese día a la 13.30 horas, acompañado de su madre, salió con su coche de la agencia de viajes que regenta junto a su hermana en Valladolid para ir a recoger a su hija al colegio en La Cistérniga.

A continuación, el sospechoso esperó hasta las 14.00 horas a que su hija saliera del colegio coincidiendo con su expareja y madre de la niña a las puertas del centro escolar. Además de explicar los hechos, Óscar ha aportado los mensajes de SMS que se enviaron entre la madre de su hija y él, así como las facturas y los envíos donde figuran los teléfonos móviles. No solo el sospechoso explica donde se localizaba ese día a esa hora, sino que también ha explicado por escrito a la jueza donde se situaba el 4 de abril, fecha en la que presuntamente habría borrado los datos de su coche por segunda vez.

Ante este escenario, el principal investigado apunta a que se encontraba comprando un regalo para su expareja porque era su cumpleaños y defiende que él salió de su casa en La Cistérniga a las 11.02 horas y se dirigió hasta el parking de la Plaza de Zorrilla con su hija para comprar dicho regalo. Las horas aportadas por Óscar es que llegó al parking a las 11.16 horas y salió de allí a las 12.10 horas. Para acreditar estos movimientos, el sospechoso ha aportado el recorrido de Google, el ticket del parking donde se recoge la estancia y matrícula de su vehículo, así como los tickets de las compras realizadas en varias tiendas. Ante esta explicación y movimientos, la defensa del investigado considera «totalmente imposible» que si sale de casa a las 11.02 horas y llega al parking de Zorrilla a las 11:16 haya podido manipular la centralita de su vehículo a las 11.05 horas, como sostienen los peritos.

Según el informe al que ha tenido acceso Valladolid Plural, el 8 de junio de 2022, el principal sospechoso y se hermana Sofía S.M. hablaron por teléfono de una fecha muy concreta, la del 1 de febrero, donde Óscar preguntaba si se podía saber a qué hora se había conectado la alarma de seguridad de la agencia de viajes donde trabaja. Ante esta pregunta, su hermana le respondía que este informe se lo tenía que pedir a la empresa de seguridad pero le adelantaba que este documento solo indicaría la hora que se ha conectado y la hora que se ha desconectado, pero no indicaría en ningún caso quien lo hace.

Ante esta información, Óscar le contestaba que con saber la hora le valía. Unos mensajes que resultan fundamentales en la investigación ya que Óscar tendría que dar explicaciones ante la jueza sobre el interés de esta fecha y hora porque se puede apreciar una búsqueda de coartada para justificar donde estaba el 1 de febrero, fecha en la que la Guardia Civil incide que se hace el primer borrado de la centralita de su vehículo.