«El Gobierno de Valladolid es difícilmente exportable porque el factor personal es clave y aquí se ha dado la circunstancia de que había personas al frente de los proyectos que tienen un buen talante y es muy fácil trabajar con ellas». Así se ha referido el alcalde de Valladolid, Óscar Puente, al buen entendimiento que existe entre los partidos que conforman el Equipo de Gobierno y ha permitido que por octavo año consecutivo se aprueben unos Presupuestos para la ciudad. Puente junto a la concejala de Medio Ambiente y portavoz de Toma la Palabra, María Sánchez, y el concejal de Hacienda y portavoz del PSOE, Pedro Herrero, han valorado las nuevas cuentas municipales para el próximo año.
El Equipo de Gobierno ha destacado que el Presupuesto para 2023 es el mayor de la historia con 404 millones de euros y están dirigidos a la transformación de la ciudad para abrir un importante futuro para los vallisoletanos. «Estos presupuestos municipales representan un peldaño más en la misma dirección, si bien anticipan la que va a ser una nueva etapa en la historia de la ciudad, que ya se vislumbra. Nos disponemos a encarar un lustro de intensa transformación en muchos aspectos, entre los que destacan el industrial, ecológico, logístico y tecnológico, y lo hacemos estando preparados», ha señalado el primer edil.
Puente también ha remarcado durante su intervención el importante peso en materia pública que desde el Consistorio están apostando en los últimos tiempos: «Este dato demuestra de qué manera las políticas de este Equipo de Gobierno están fortaleciendo el sector público municipal. De hecho, el valor patrimonial del Ayuntamiento, es decir, el patrimonio público municipal que es de toda la ciudadanía de Valladolid, se ha visto multiplicado por tres en estos años del Gobierno Municipal formado por el PSOE y VTLP».
«Cuando asumimos el gobierno municipal lo hicimos convencidos de la necesidad de sintonizar nuestras políticas con los objetivos de desarrollo sostenible. Una visión a quince años vista, con horizonte 2030. Este convencimiento nos llevó incluso a aprovechar los casi tres años de pandemia para acelerar reformas e inversiones clave para mejorar el nivel de calidad de vida de la ciudad a largo plazo. Pues bien, el tiempo y los resultados se están encargando de demostrar que nuestra estrategia es la acertada. Basta comparar nuestra situación actual con la de otras ciudades y administraciones», aseveró el alcalde de Valladolid quien también tuvo ocasión para criticar la gestión de la Junta de Castilla y León y el Gobierno conformado por PP y Vox.
En este sentido, Puente señaló que considera «clave» el factor personal en comparación al Ejecutivo autonómico que forman los populares con la extrema derecha, y ha recomendado a los gobernantes de la Junta de Castilla y León que «lo primero es tener concepto de gobierno único», pues entiende que en otras administraciones da «la sensación de que son dos gobiernos de dos partidos». También ha subrayado la importancia del diálogo, por el que se debe apostar «lo más posible para hacer terapia, reunirse, limar asperezas», y ha recalcado que en el Ayuntamiento de Valladolid han «cuidado mucho» el componente personal hasta el punto que Puente ha contado como anécdota que en «las Navidades nos vamos a cenar juntos», refiriéndose a los concejales de PSOE y Toma La Palabra.
En este sentido, la edil de la formación de izquierdas María Sánchez ha subrayado que cuando ambos partidos entraron a formar parte del Equipo de Gobierno hace ya casi 8 años tenían claro que les movía el «bien común» y también ha destacado que en su caso «aunque estés en desacuerdo en ciertas cuestiones, antes que hacer ruido hay que pararse a pensar y hablar las cosas y poner las diferencias encima de la mesa», en relación a asuntos dispares que cada formación política defiende. Precisamente, Puente y Sánchez han coincidido en que este buen entendimiento entre ambas formaciones sería «imposible» a que concurrieran en una lista conjunta a las elecciones municipales de 2023 e incluso se han atrevido a pronosticar a que esta unión no funcionaría.
Sánchez ha recordado que los ediles de la formación de Valladolid Toma La Palabra tienen un «espacio político propio» formado por IU y Equo y «parece que se va ampliar» con la incorporación de Podemos en el proceso de integración que desde hace mes y medio está en marcha en las formaciones de izquierdas de Valladolid. De hecho, ha confesado que sería «perjudicial» porque aunque gobiernen bien juntos en el Ayuntamiento de Valladolid, sus programas son «diferentes» y de esa manera considera que se perdería el valor del diálogo para llegar a proyectos comunes beneficiosos para el resto de la ciudadanía.