Óscar Puente vive sus últimas horas como alcalde de Valladolid ante la sesión constitutiva de la nueva Corporación Municipal este sábado 17 de junio y su reacción al pacto entre PP y Vox en el Ayuntamiento no ha tardado en aparecer. El socialista ha asegurado que Jesús Julio Carnero está «preocupado» por el acuerdo con Vox porque de no ser así habría hecho público el contenido y distribución de las áreas entre ambas formaciones. El alcalde en funciones ha manifestado también su preocupación por la falta de detalles, una situación que le parece «anómala» e «inaceptable» desde el punto de vista democrático.
El regidor vallisoletano ha valorado el acuerdo durante la inauguración oficial del Festival de la Tapa en la Acera de Recoletos, en el que ha sido su último acto institucional como alcalde en funciones, y todo ello a escasas horas de que el Partido Popular y Vox dieran a conocer a través de un comunicado que habían llegado a un acuerdo para gobernar en el Ayuntamiento de Valladolid. Dicho escrito tan solo aclaró que el Gobierno municipal estará formado por diez concejalías de área, de las que el PP ocupará siete y Vox, tres; además de confirmar que Carnero será investido como alcalde e Irene Carvajal será la teniente de alcalde.
En este sentido, Puente ha indicado que si Carnero no ha dado a conocer los detalles del acuerdo de gobierno antes de la investidura «es porque tiene esa preocupación, no sé si cierta vergüenza y sigue en esa especie de estrategia de huida hacia adelante a ver si dilatando las cosas evita las críticas», ha interpretado el socialista. Óscar Puente también ha reflexionado sobre el dicho de que «en política todos son iguales» y asegura que no es así por parte de PP y Vox al comparar las gestiones y negociaciones que llevaron a cabo PSOE y VTLP durante los dos anteriores mandatos donde «antes de la toma de posesión se supo qué área y qué responsabilidad iba a tener cada uno y cuáles eran los contenidos del acuerdo político».
El regidor socialista tampoco ha perdido la ocasión de echar en cara al futuro alcalde de Valladolid que esa actitud no solo se ha dado con su Gobierno sino que en tiempos del exalcalde del PP, Javier León de la Riva, también se conocía «cuántas áreas iba a haber, quién iba a llevarlas, cuál era el plan, y cuál era el proyecto». «Eso es lo normal en democracia. Lo anormal es que se pidan cheques en blanco, mañana voten ustedes, elíjanme de alcalde y ya les contaré a partir de lunes lo que voy haciendo», ha remarcado. Por todo ello, Óscar Puente, que continuará en la Corporación como Presidente del Grupo Municipal Socialista ha advertido a los populares y a los miembros de la formación de Abascal de que «uno no puede vivir permanentemente huyendo de los medios de comunicación, saliendo por la puerta de atrás de las Cortes», ya que el Ayuntamiento de Valladolid «es otra cosa y hay que dar la cara».
El alcalde en funciones también ha confesado que vive este adiós a la Alcaldía con «normalidad» y «naturalidad» porque a su juicio, así es la democracia y «el poder no pertenece a los políticos, sino al pueblo». «Como nunca he creído que fuera patrimonio mío, pues con la misma naturalidad con la que lo asumí, lo suelto», ha asegurado. Por último, en cuanto a la preparación del traslado de poderes, Puente ha asegurado que ha mantenido dos reuniones con el futuro nuevo alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, y ha explicado que las dos han sido a iniciativa suya. «Como demócrata que soy, lo que quiero es que el equipo de Gobierno que entre sepa lo que hay pendiente desde el primer momento», ha recalcado. El último encuentro, como ha explicado Puente, se produjo este lunes por duración de tres horas y Carnero le emplazó a que «en cuanto tuvieran las áreas» se reunirían los concejales que van a asumir las responsabilidades de área para hacer un traspaso «en condiciones».
