El delegado del Gobierno en Castilla y León, Nicanor Sen, ha mantenido este lunes en dependencias ministeriales una reunión de trabajo con el secretario de Estado de Seguridad, Rafael Pérez, para abordar y reforzar la ejecución de las políticas de Interior en materia de seguridad en el territorio. Una reunión, en la que entre otras cuestiones, se abordó la situación actual de los centros penitenciarios de la Comunidad, poniéndose de manifiesto el importante esfuerzo inversor que se está llevando a cabo desde el Ministerio del Interior en la modernización de las instalaciones.
En este punto, Nicanor Sen trasladó la necesidad de reforzar la plantilla de personal penitenciario, a la par que se interesó por el estado en el que se encuentra el proyecto para la puesta en marcha del módulo de presos en el Hospital de Salamanca, al que según se remarcó en el transcurso de la reunión, «el Ministerio de Interior nunca ha renunciado». En la actualidad, se está elaborando el convenio para adaptar el espacio a las necesidades de seguridad que exige la hospitalización de internos en un centro hospitalario, un proceso que lleva sus tiempos y trámites. De ahí que la puesta en marcha de este espacio depende ahora de una cuestión meramente administrativa y no económica, señalan desde la Delegación gubernamental.
El otro gran asunto que se abordó en la reunión fue la situación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, con el compromiso encima de la mesa del Gobierno de España de seguir avanzando en el incremento de la plantilla de Guardia Civil y Policía Nacional en Castilla y León. Un objetivo en el que se viene trabajando en los últimos años, en los que se ha alcanzado un máximo histórico de agentes, rozando los 10.000 en la Comunidad, y recuperar más del 80% de la plantilla perdida en los últimos años. En cualquier caso, Sen trasladó a Pérez la necesidad de priorizar el refuerzo de la plantilla de la Guardia Civil en determinadas zonas del territorio donde se ha detectado un número deficitario de agentes para cubrir las necesidades.
La reunión celebrada en la jornada de este lunes también permitió avanzar en otras líneas de actuación en materia de seguridad, poniendo el foco en el incremento de la ciberdelincuencia, y en la que se puso de manifiesto que Castilla y León se mantiene entre las comunidades más seguridad de toda España, con una tasa de criminalidad 14 puntos inferior a la media nacional.
