Los organizadores del concierto de Natos y Waor en Valladolid: «La imagen difundida se aleja de la realidad»

El polémico concierto de Natos y Waor en Valladolid sigue trayendo cola con explicaciones sobre si se cumplieron o no las medidas de seguridad contra la COVID-19. La empresa PaSiÓn Eventos, organizadores del concierto de Natos y Waor el pasado 4 de diciembre en la capital vallisoletana han decidido emitir un comunicado para aclarar todas las dudas sobre la organización de la actuación y han querido «exponer toda la información de forma transparente sobre los protocolos anti Covid activados y cómo se desarrolló el evento debido a las graves acusaciones».

PaSiÓn Eventos explica – a través de un comunicado oficial- que el concierto se realizó dentro de la «legalidad con los permisos de la Junta de Castilla y León y el Ayuntamiento de Valladolid». Además, indican que presentaron la documentación correspondiente como el plan de auto protección, contrato con la empresa de seguridad, máster de seguridad , guía y protocolo COVID, seguros, certificados de las empresas trabajadora, prevención de Riesgos Laborales y autorización y permisos por todas las autoridades.

El evento se desarrolló dentro del «aforo legal que permiten actualmente las autoridades sanitarias, 100% del aforo, aún así nunca se llegó a poner a la venta el 100% del aforo por parte de la organización», detallan. La empresa organizadora puso a la venta un total de 1.700 entradas que «se agotaron meses antes» cuando el aforo legal máximo del Polideportivo Pisuerga en la pista es 1.900 personas, junto con 2.323 entradas vendidas frente a las 3.084 plazas permitidas en la grada. PaSiÓn eventos aclara que hubo un total 3.932 asistentes al concierto.

Los organizadores se han visto obligados a dar estas explicaciones ante la investigación abierta por parte de la Junta de Castilla y León por las imágenes difundidas a través de las redes sociales de los artistas Natos y Waor donde se aprecian que las personas no portaban mascarillas y no respetaban la distancia de seguridad. Estas diligencias conducirán a la apertura de un expediente sancionador, en principio contra los promotores del concierto, que en función de la tipificación que se haga del incumplimiento de la normativa estatal podrá ser instruido bien por la propia Delegación Territorial de la Junta, en caso de que se considere como un delito grave, o por la Consejería de Sanidad, en el caso de que se considere como delito muy grave, según informan fuentes de la Junta.

La empresa promotora indica que los asistentes fueron informados en todo momento que dentro del recinto el uso de mascarilla era obligatorio durante todo el evento. Se les informó con señalética visible en todo el recinto: proyección de mensajes de responsabilidad en la pantalla gigante del escenario, además de un equipo humano de producción y vigilantes de seguridad que constantemente recordaban a los asistentes del uso correcto de la mascarilla.

PaSiÓn Eventos considera que la imagen que se ha mostrado en todos los medios y redes «se aleja de la realidad de cómo se desarrolló el concierto ya que es una imagen selfie – photo finish que se realiza al finalizar el concierto, donde el público quiere aparecer con su rostro sin mascarilla en la instantánea que lanza su artista favorito desde el escenario». «Es un acto reflejo más que una imprudencia o irresponsabilidad ya que el comportamiento fue normal dentro de lo que conlleva un acto multitudinario de estas características, donde siempre hay algún comportamiento incívico el cuál siempre tratamos de controlar y resolver», apuntan.

En el comunicado continúan alegando que «en todo momento estuvimos coordinados con las fuerzas del estado para que el desarrollo del evento fuera seguro al 100% y así lo comunicaron a través de sus redes sociales», con mensajes desde el perfil de Twitter de la Policía Municipal de Valladolid afirmando que «comprobamos las medidas de seguridad en el concierto de Natos y Waor en Valladolid. Todo correcto».

A pesar de todo el revuelo ocurrido durante estos últimos días, los promotores del concierto muestran que a todos los asistentes también se les facilitó una guía de recomendaciones a través de la plataforma de venta wegow en el que se explica el uso obligatorio de la mascarilla y los diferentes accesos al recinto. «Hemos demostrado que la cultura es segura y así seguiremos haciéndolo. Todas las personas implicadas en la organización de este concierto y sus artistas hemos sufrido mucho esta pandemia y la vuelta a los escenarios se ha hecho siguiendo todos los protocolos que marca la ley actual porque no buscamos lucrarnos a costa de la salud pública y poner en riesgo nuestro nombre y nuestro buen hacer», confiesan.

Finalmente, PaSiÓn Eventos cierra este episodio invitando a «todos los medios de comunicación, epidemiólogos, políticos, fuerzas de seguridad del estado que vean cómo trabajamos en el próximo concierto de Rozalén que tenemos este sábado 11 de diciembre en el mismo recinto», concluyen.