La pandemia de Covid 19 ha motivado un cambio en la organización de diversos procesos asistenciales, lo que ha llevado a priorizar, siempre que sea posible, evitar el desplazamiento del paciente al centro asistencial. El Servicio de Rehabilitación del Hospital Universitario Río Hortega de Valladolid ha querido dar un paso más en esta idea y, por ello, puso en marcha hace ahora dos años el programa de rehabilitación a domicilio.
Esta opción es prescrita por el médico rehabilitador en base a criterios clínicos y sociales. El paciente es valorado en la consulta externa del hospital, tanto si ha sido derivado desde Atención Primaria como desde Especializada, y, posteriormente, es el fisioterapeuta el que se desplaza hasta su domicilio. Es un tipo de servicio especialmente recomendado para aquellos ciudadanos que no pueden o tienen serias dificultades para hacer un tratamiento ambulatorio, bien sea por su estado general o por problemas para desplazarse, siempre y cuando no precisen de forma obligada de la sala de fisioterapia para realizar su tratamiento de manera eficaz.
Algunos de las personas que suelen utilizar la rehabilitación a domicilio son los pacientes de ictus y otras patologías del sistema nervioso central, de artroplastias de cadera y rodilla, de edad avanzada que hayan sufrido fracturas, con síndromes de inmovilidad tras estancia hospitalaria prolongada, de rehabilitación respiratoria básica y casos postcovid que necesiten seguimiento.
Durante los dos años que esta iniciativa lleva en funcionamiento, 142 pacientes se han beneficiado de estos tratamientos domiciliarios, la mayoría de ellos personas de edad avanzada con fracturas de miembro superior.