Aún dura la sonrisa en Valladolid. Aún parece increíble el guion de los minutos previos a la victoria ante el Villarreal B y el consecuente ascenso. No es atrevido decir que nadie con el corazón blanquivioleta se olvidará de aquellos momentos mágicos. Pero el Pucela tiene ante sí un nuevo reto, el último de esta temporada tan dura y compleja. 17 años después del último trofeo, los de Paulo Pezzolano tienen la oportunidad de conseguir el campeonato de Segunda División por cuarta vez en la historia blanquivioleta. Una victoria supondría el título, aunque en caso de empate o derrota, habría que poner los ojos en lo que pueda hacer el Leganés en Butarque ante el Elche.
Otro objetivo es mantener la portería a cero para culminar la racha de partidos sin encajar, y de paso, conseguir el Zamora para Jordi Masip. Pezzolano, que estuvo toda la semana en el foco por sus polémicos actos, hizo hincapié en la importancia de reconectarse tras la consecución del ascenso para pelear por una bonita meta que pocas veces está al alcance. «Va a ser un partido duro por lo emocional, el ascenso lo tienen tres y el campeonato uno, tenemos que ir a lograrlo. Logramos un ascenso espectacular, que era el objetivo, estamos trabajando en conectar esas cabezas, el que esté medio desenchufado no va a tener cabida porque necesitamos ganar el partido«, reconocía el uruguayo este pasado viernes en la previa del choque.
Enfrente de los pucelanos estará este domingo 2 de junio un Tenerife que se juega la satisfacción de despedir la temporada con victoria ante su público. Nunca ha sido un territorio fácil el feudo tinerfeño, aunque en está en el recuerdo la victoria en la última visita. Como locales, los chicharreros no han logrado hacer del Heliodoro Rodríguez López un bastión y suman allí 35 puntos gracias a diez victorias, cinco empates y cinco derrotas. Los blanquivioletas como visitantes han ido de menos a más, y a falta de lo que pase este domingo, son el quinto más peligroso de la categoría con 25 puntos a lo largo de siete victorias, cuatro empates y nueve derrotas.
El partido comenzará a las 18.30 horas y será dirigido por Ávalos Barrera, auxiliado en la sala VOR por Ais Reig. Esta será la cuarta vez que el colegiado nacido en Igualada (Barcelona) en 1987 se cruce con el Pucela en lo que va de curso. La primera se produjo en la jornada 2, en un partido con polémica en una acción sobre Cédric y que finalmente se llevó el Zaragoza por la mínima. La segunda fue en la primera eliminatoria de la Copa del Rey, en la que el Pucela venció por 1-5 a la Peña Deportiva; mientras que la más reciente se produjo en Zorrilla, en la goleada por 3-0 contra el Oviedo, en un duelo con tan solo una tarjeta amarilla para cada equipo.
Además, existen otros dos precedentes con él al silbato en la temporada 2021/22, en los dos encuentros frente al Fuenlabrada. En el primero, el Real Valladolid se impuso 3-0 y el conjunto madrileño acabó con diez por la expulsión de Pulido; mientras que en el segundo, con nueve tarjetas amarillas, ninguno de los dos equipos logró marcar con un 0-0 en el marcador.
