Desarticulada una red criminal en Valladolid que falsificaba certificados de corriente de pago con la Seguridad Social

La Policía Nacional, en el marco de la operación ‘GRIMALDO’, ha desarticulado un grupo criminal en Valladolid que defraudó a la Seguridad Social más de 150.000 euros. El pasado 27 de junio se detuvo a un varón de 32 años de edad con un antecedente policial por falsificación documental, como presunto autor de los delitos contra la Seguridad Social y la Hacienda Púbica y pertenencia a grupo criminal. El perjuicio económico total causado a la Tesorería de la Seguridad Social por el entramado de empresas investigadas asciende a 151.000 euros

La investigación se inició en los meses de mayo y junio, fruto de la colaboración con la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social de Valladolid en la lucha contra el fraude a la Seguridad Social y el empleo irregular. Tras el análisis patrimonial de las empresas y de sus responsables, se detectaron ocho empresas que se dedicaban a la intermediación agraria proporcionando a los agricultores mano de obra para faenar en el campo en actividades como la vendimia, poda en seco y recogida de patata. Seis de las empresas tienen domicilio social en la provincia de Valladolid.

Los trabajadores eran seleccionados y dados de alta en la Seguridad Social por la empresa intermediaria la cual al finalizar los servicios emitía una factura al agricultor, su cliente. Sin embargo las obligaciones de las cuotas por disponer de empleados no eran cubiertas y se iba acumulando mensualmente una deuda importante. Cuando obtenían un nuevo cliente, éste les solicitaba certificados de estar al corriente de pagos con la Seguridad Social para evitar así su responsabilidad subsidiaria, por lo que se cerraba esa empresa y abrían una nueva a nombre de otro de los miembros. Al ser de nueva creación era una empresa «limpia» de deudas y así se aseguraban poder obtener certificados de estar al corriente del pago para poder presentar al futuro cliente.

Los integrantes del grupo son seis personas, manteniendo este modus operandi durante más de tres años, por lo que cuando todos ellos ya habían sido titulares de empresas unipersonales y por lo tanto a su propio nombre figuraba una deuda sin cubrir con Seguridad Social, comenzaron a crear sociedades limitadas contando así con una denominación social diferente que les permitía seguir con su actividad. El detenido era el líder de la red y también falsificó certificados simulando estar al corriente del pago con Seguridad Social para ser entregados sus clientes.

Durante el periodo en que uno de los miembros era titular de la empresa activa en ese momento, el resto figuraban como trabajadores por cuenta ajena de sus propias empresas, generando así una vida laboral ficticia que en el futuro les pudiera dar derecho a solicitar el cobro de prestaciones o subsidios públicos. El entramado operaba principalmente en la provincia de Valladolid aunque los investigadores no descartan que pudieran haber continuado su expansión a provincias limítrofes como Segovia y Burgos.

La operación continúa abierta a la espera de localizar y detener a más integrantes de la red. El detenido, tras prestar declaración en dependencias policiales, fue puesto en libertad con cargos. La operación ha sido realizada por la Unidad Contra las Redes de Inmigración Ilegal y Falsedades Documentales (UCRIF) de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de la Comisaría Provincial de Valladolid y por el Grupo de Extranjería de la Comisaría Provincial de Segovia.