El teniente coronel de la Unidad Especial de Intervención (UEI) de la Guardia Civil, Pedro Alfonso Casado, ha fallecido este martes en el Hospital Clínico de Valladolid tras recibir un disparo en la cabeza durante los violentos incidentes en Santovenia de Pisuerga. El agente de la Guardia Civil había sufrido lesiones «irreversibles e incompatibles con la vida» a causa del disparo con un rifle por parte del atrincherado de la localidad vallisoletana.
El oficial fallecido estaba ingresado desde el pasado viernes en el Hospital Clínico de la capital vallisoletana y a pesar de que la intervención quirúrgica había dado esperanzas de vida, el hombre acaba de fallecer por muerte cerebral. El homicida de Santovenia disparó en la mañana del pasado viernes, desde el interior de su vivienda a la calle «a ciegas» al exterior y la bala alcanzó al agente en la cabeza atravesando el casco que llevaba puesto.
En las últimas horas, su estado de salud se había complicado especialmente en el hospital y su familia tomó la decisión de que no trascendiera públicamente todo lo que estaba sucediendo. La Delegación del Gobierno en Castilla y León trasladó a los medios de comunicación el deseo de la familia pidiendo «respeto» hacia el teniente coronel y sus allegados, y tras conocerse la trágica noticia en la mañana de hoy, no se han facilitado datos sobre el fatal desenlace del estado de salud del teniente coronel.
‘Perico’, como conocían sus compañeros y amigos al teniente coronel de la Guardia Civil herido tenía 50 años con 22 años de trayectoria en la Unidad Especializada de Intervención (UEI) dirigiendo decenas de incidentes con rehenes. Pedro Alfonso Casado era natural de Vitoria con raíces de la provincia de León. Tras salir de la Academia de Zaragoza en 1998 entró a formar parte del GAR (Grupos de Acción Rural) y un año después comenzó en su actual servicio, la UEI, equipo con base en Madrid. El teniente coronel llegó en la mañana del viernes 1 de julio a Santovenia junto a sus compañeros, organizando el dispositivo como enviados especiales para intervenir en el altercado con rehenes.
El autor del disparo al agente fallecido fue el hombre quien previamente había asesinado presuntamente a su vecino también de un disparo en el portal de su vivienda y momentos después se atrincheró con un rehén en otro domicilio cercano a los hechos. El presunto homicida ingresó en prisión el pasado domingo acusado de asesinato, atentado, detención ilegal y tenencia ilícita de armas.
