Condena de 4 años y medio de prisión para un hombre por encargar el robo en el chalé de su jefa en Aldeamayor mientras cenaban juntos

El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León ha confirmado la condena de cuatro años y seis meses de prisión a un varón por encargar un robo en el chalé de su jefa y amiga en la localidad vallisoletana de Aldeamayor de San Martín, durante una invitación que el acusado realizó a la víctima para cenar en una bodega en Fuensaldaña. La sentencia de la Sala de lo Civil y Penal del TSJCyL desestima el recurso del condenado y confirma la sentencia anterior de la Audiencia Provincial de Valladolid el pasado mes de febrero, en la que se imputaba al hombre la autoría de un delito de robo con fuerza en una casa habitada, con la agravante de abuso de confianza, al tiempo que le obligó a indemnizar a la víctima en la cantidad de 120.000 euros por el metálico sustraído, 2.000 euros por daño moral y 1.850 euros por los efectos sustraídos y no recuperados.

Según ha tenido acceso este periódico a la sentencia, desde el 2016 el acusado mantenía una relación profesional como autónomo con la afectada, siendo contratado en 2019 como coordinador de las dos clínicas que tenía en Cáceres y Valladolid, desempeñando la mujer las funciones de directora y gerente. Además de esta relación profesional, ambos tenían relación de amistad entre las familias.

Los hechos condenados se remontan al mes de diciembre de 2019 cuando el hombre insistió a su jefa, que padecía problemas de salud, para salir los dos juntos a cenar esa noche, y esa misma tarde, el empleado entregó a la mujer los sobres con el dinero de la recaudación de una de sus clínicas. El varón entró en la vivienda como había hecho en ocasiones anteriores y dejó sus efectos personales en la habitación de invitados que había en la planta superior del inmueble. Posteriormente, los dos acudieron a cenar a un establecimiento de Valladolid y durante la cena, contrariamente a lo que era habitual cuando ambos compartían mesa, el varón estuvo haciendo un uso frecuente de su teléfono móvil y realizó tres llamadas a un tercero del que no se ha podido determinar su ubicación en aquellos momentos.

Todas estas llamadas cruzadas obedecían, según la sentencia del TSJCYL, al plan urdido por el acusado para apoderarse del dinero en metálico y objetos de valor que la mujer, su jefa, tenía en su vivienda y que él conocía por la estrecha relación personal y profesional que mantenía con ella, facilitando así a los usuarios de estos teléfonos móviles que se desplazaron hasta el domicilio, la garantía de que ella no iba a volver al domicilio mientras que se encontraba cenando con él y la localización de los sitios en los que estaban guardados tanto el dinero como varias joyas.

Los delincuentes que accedieron a la vivienda en Aldeamayor se llevaron la cantidad de 60.000 euros. Además, de una caja donde la mujer guardaba distintos relojes, apoderándose de un reloj marca Michael Kors dorado, un reloj marca Cartier plateado, un reloj marca Festina, un reloj marca Guess, otro reloj marca Cartier, un reloj marca Chanel, cinco relojes marca Tous y un reloj marca Emporio Armani, así como dos bolsos marca Louis Vuitton, una cartera marca Carolina Herrera y varias gafas de sol de las marcas Michael Kors, Armani, Rayban y Tommy.

Tras la práctica de varias diligencias de investigación en el curso de esta causa, el día 3 de diciembre de 2020, agentes de la Guardia Civil acudieron a la clínica que regentaba el hombre, en la que se intervinieron en el puesto de trabajo de este la cantidad de 6.680 euros en metálico. El mismo día, a las 17.15 horas, con la correspondiente autorización del Juzgado de Instrucción número 2 de Valladolid, por parte del Juzgado de Instrucción número 16 de Madrid, se llevó a cabo la entrada y registro en el domicilio del varón, donde se intervinieron 24.870 euros en metálico, cinco relojes marca Tous, un reloj Cartier, otro reloj marca Guess, un reloj marca Festina y una cartera marca Louis Vuitton. La mujer identificó estos efectos que le fueron sustraídos de su domicilio el día 7 de diciembre de 2019, teniéndolos desde entonces en su poder en concepto de depósito. Los efectos sustraídos y no recuperados han sido tasados en la cantidad de 1.850 euros.

A consecuencia de estos hechos la mujer, vecina de Aldeamayor, ha sufrido un agravamiento de una patología psiquiátrica previa por la que había seguido tratamiento con anterioridad, provocando estos hechos un estado de intensa ansiedad, con tristeza y llanto fácil, autocrítica, alteraciones de sus ciclos vitales de alimentación o sueño, habiendo seguido por ello tratamiento psiquiátrico que continúa en la actualidad y en el que se le han prescrito diversos fármacos.

El acusado deberá cumplir una pena de 4 años y seis meses de prisión por un delito de robo con fuerza. Además, de una indemnización, en el ámbito de la responsabilidad civil, por la cantidad de 120.000 euros por el metálico sustraído, 2.000 euros por daño moral y 1.850 euros por los efectos sustraídos y no recuperados.