Tierra de Campos viaja de nuevo a la época Renacentista de la mano del Mercado de la India Chica de Medina de Rioseco. Sin duda alguna, uno de los eventos más atractivos del periodo estival vallisoletano, y que este año ha recuperado su total normalidad recibiendo a miles de vecinos y visitantes que han disfrutado de unas jornadas que recuperan la tradición mercantil que tanto caracteriza a la villa. Decenas de puestos cobraban vida en el casco urbano de Rioseco con gran variedad de productos gastronómicos, artesanales, libros, orfebrería o arte floral.
Medina de Rioseco clausuró este domingo su XXV Mercado de la India Chica tras un fin de semana ajeteadro con mercado, animación, música y teatro por las calles riosecanas que como no podía ser de otra manera estaban engalanadas para la ocasión. Además, los más pequeños disfrutaron durante estos días de talleres sobre oficios artesanos y carruseles antiguos que ambientaban la localidad en la época del Renacimiento.
Y es que cualquiera que atravesara las vías de Rioseco podía verse envuelto en el habitual ambiente característico de los mercados históricos. Como si la máquina del tiempo se hubiera activado. La jornada dominical comenzó con la actuación de músicos y juglares que acompañaron a la marquesa en su visita al mercado. Posteriormente, fue el turno de las aves rapaces y exóticas que ofrecieron un espectáculo de cetrería desde el Atrio de Santa Cruz ante la atenta mirada del público que se mostraban perplejos ante el adiestramiento de estos animales y sus espectaculares vuelos.
Por la tarde, el Mercado de la India Chica estuvo amenizado por los conocidos ‘Esperpentos’ que daban su toque de humor entre los asistentes con sus locuras y levantaban las carcajadas de todo aquel que sufría alguna de sus bromas. Y entre música y danza, llegaban también ‘Los Meninos’ para animar las compras de todos los riosecanos y forasteros con sus historias y peripecias. Para finalizar, antes de que los puestos del mercado cerraran, el grupo ‘Kabayla Zingary. Show Nubia’ deleitó al público con una actuación musical en el Corro de Santa María.
Desde el Ayuntamiento de Medina de Rioseco se muestran satisfechos con esta edición del Mercado de la India Chica que ha tenido una gran afluencia de público durante todas las citas y que ha vuelto a sacar a las calles a miles de vecinos que veían como en las últimas ediciones no se pudo disfrutar de esta cita ya tan querida y arraigada en el municipio vallisoletano.
Por su parte, el alcalde de Medina de Rioseco, David Esteban, ensalzaba el Mercado de la India Chica por ser una «referencia en la comarca que ya va en camino de las treinta ediciones». En sus orígenes, la localidad vallisoletana tuvo gran importancia en la tradición mercantil, y más concretamente en 1371, cuando una cédula con exención fiscal permitió la celebración de mercados en la ciudad lo que provocó que feriantes y mercaderes procedentes de distintas zonas se acercaran a esta tierra para hacer sus labores comerciales. Años más tarde, en 1555, Rioseco se convirtió en un punto de entrada junto a Sevilla y otros emplazamientos para comerciar. De este hito histórico surge el nombre de la India Chica y de la ciudad de los mil millonarios que recibió Medina de Rioseco.
Un broche de oro a un verano cultural muy mágico y especial, puesto que si al Mercado de la India Chica, le sumas el gran programa de conciertos de agosto de la manos de ‘Festivales con Encanto’ junto a la Feria del Caballo te sale un verano de lo más entretenido en Rioseco. Sin pasar por alto su Semana Santa y Navidad, dos señas de identidad que crecen a pasos agigantados con reconocimientos fuera de nuestras fronteras. Porque como bien nos dice el alcalde de la ciudad, «Medina de Rioseco es extraordinaria y atractiva los 365 días del año».
