La distribuidora de Iberdrola, i-DE, ha puesto en marcha en Tudela de Duero un nuevo transformador inteligente denominado i-Trafo, una infraestructura pionera y que supone todo un hito en la distribución eléctrica. El objetivo que de la compañía es adaptarse a las demandas de un futuro cada vez más electrificado y verde, y por ello ha instalado este transformador que optimiza el consumo energético y la mejora de las tensiones del suministro de los clientes. Este viernes 2 de diciembre, se ha presentado en la localidad vallisoletana la instalación de este i-Trafo de la mano del director de i-DE en Castilla y León, Óscar Villanueva, y la responsable de procesos de digitalización de la distribuidora de Iberdrola, Itziar Lumbreras, junto al alcalde de Tudela de Duero, Javier Gómez.
El nuevo transformador anticipa las fluctuaciones de tensión y corrige las mismas de manera proactiva, lo que supone un gran paso en el desarrollo de la tecnología necesaria en los próximos años para transformar la red de distribución local de las ciudades y del medio rural en inteligente. «Este tipo de transformadores ya lo tenemos en las grandes subestaciones pero hemos hecho un desarrollo para que este transformador inteligente que lo llamamos i-Trafo se pueda instalar en espacios más pequeños», destaca Óscar Villanueva. Castilla y León ya cuenta con en torno a 15.000 centros de transformación en los cuales se analiza la idoneidad para poder instalar este tipo de máquinas.
La novedad del i-Trafo es la regulación de la tensión de tal forma que permite optimizar el consumo para conseguir una mayor integración de energías renovables, por ejemplo, en el autoconsumo. «Estamos teniendo numerosas peticiones de autoconsumo y con esta infraestructura se podrán integrar en la red sin que haya problemas técnicos», así lo define Villanueva quien además apunta que este transformador inteligente facilita la transición de electrificación de la economía. En Castilla y León se ha registrado en el pasado mes de octubre una media de más de 10 peticiones de autoconsumo diarias, con una «tendencia exponencial» y actualmente la compañía eléctrica cuenta con alrededor de unos 5.000 usuarios de autoconsumo.
Los beneficios de este transformador que se ha instalado en Tudela de Duero se traduce en la calidad del suministro para los ciudadanos. Según explica uno de los responsables de este proyecto, «lo que va a notar el consumidor es que no va a tener problemas a la hora de instalar placas fotovoltaicas, implantar su autoconsumo o el cambio de aerotermia de electrificación de su casa. Está todo pensado para que el usuario no tenga ningún problema de suministro eléctrico». Con este nuevo i-Trafo se beneficiarán aproximadamente unos 300 vecinos de Tudela, siendo una de las primeras localidades de la Comunidad en contar con esta infraestructura innovadora que dispone de un regulador autónomo de tensión y una tecnología que además comunica de manera directa con el centro de control de i-DE.
La innovación y digitalización de las redes eléctricas seguirá mejorando la calidad de suministro y la atención a los ciudadanos haciendo más eficiente la energía que estos consumen. Como explica Itziar Lumbreras, Iberdrola ha querido ir de la mano de la empresa salmantina Gedelsa, que será uno de los proveedores preferentes del i-Trafo en este proyecto pionero en el mundo. Esta compañía apuesta por el tejido empresarial de Castilla y León y pone de manifiesto su relevante efecto tractor.
Este i-Trafo que se ha instalado en Tudela de Duero ha sido posible gracias a la apuesta de Iberdrola por la innovación ya que es la «palanca fundamental» para esta transición energética. Lumbreras destaca que la compañía eléctrica va a invertir unos 4.000 millones de euros en innovación hasta el próximo año 2030, por lo que se puede definir a la empresa como pionera en el desarrollo de este tipo de transformadores que optimiza la red y da más capacidad. «En estos momentos la calidad de suministro es buena pero tenemos que adaptarnos a esa demanda de futuro que cada vez está más electrificado y no solo tenemos que integrar las casas sino las bombas de calor, los vehículos eléctricos y más generación», concluye la responsable de procesos de digitalización de i-DE.
La digitalización de la red de distribución eléctrica va a permitir establecer criterios de eficiencia y sostenibilidad energética, de forma comprometida con una acción climática ambiciosa y urgente. El despliegue de la red eléctrica inteligente permitirá incorporar la ‘traza neuronal’ de la red para ofrecer un mejor servicio al ciudadano. En Castilla y León, i-DE gestiona más de 43.707 kilómetros de líneas de baja y media tensión y más de 6.410 kilómetros de líneas de alta y muy alta tensión. Asimismo, cuenta con 15.658 centros de transformación en servicio y 246 subestaciones.
