Victoria de las ardillas en una noche para el recuerdo en Pisuerga

Videomarcadores nuevos, presentación de la nueva mascota del equipo y de las categorías inferiores, y un partido de baloncesto vital entre tanto aliciente. El Real Valladolid Baloncesto redondeó una noche para el recuerdo con un triunfo sobre el Rioverde Clavijo (86-72), el cuarto consecutivo, tras un partido dominado de principio a fin por los blanquivioleta. Después de hacerse con una renta cercana a los 15 puntos en la primera parte, los de Paco García guardaron la ropa y defendieron ese botín en la segunda para cerrar la contienda sin sobresaltos y no perder fuelle con la zona alta de la tabla. El RVB no falló a una cita marcada en rojo por muchos motivos, aceptando de buen grado el intercambio de golpes que proponía Rioverde Clavijo, las ardillas mostraron sus credenciales en la pintura. Lotanna Nwgobo, ratificando su gran estado de forma, anotó los seis primeros tantos locales para mantener el pulso de los riojanos.

Esa igualdad se mantuvo en todo momento y el Pucela no fue capaz de escaparse de los logroñeses, liderados por el incombustible Txemi Urtasun, que aportó siete puntos a la causa. Así, tras varios minutos de ida y vuelta, de canastas en ambas canastas con resultado estéril en cuanto a ventajas, el primer periodo finalizó 21-19. Tras el cambio de cuarto, los de Paco García dieron un paso al frente en defensa y, ahora sí, comenzaron a escaparse. Los blanquivioletas se fueron hasta el +8 y Jenaro Díaz lo paró a tiempo solicitando una tregua que les permitió agarrarse al partido durante unos minutos más. Pero la mecha local ya estaba prendida. A base de triples, el RVB fue creciendo y abriendo brecha. Primero Sergio de la Fuente y después Maj Kovacevic por partida doble permitieron a los de Paco García pisar el acelerador y encarrilar la victoria (40-24).

Fue la máxima que dispusieron los castellanos puesto Rioverde Clavijo reaccionó y se puso a once puntos, pero un nuevo sprint final de las ardillas puso 50-35 al descanso. Los locales reanudaron el choque con un Lotanna Nwogbo imponiendo su ley y las ardillas siguieron manteniendo la iniciativa del partido. El pívot estadounidense se fue hasta los 14 tantos y comandó a un RVB que recuperó la máxima renta del partido, el +16 del segundo acto, a falta de dos para cerrar el tercero (61-45). Haciendo valer ese botín conseguido previamente y apagando todos los conatos de remontado de un combativo Rioverde Clavijo, el cuadro blanquivioleta subió ese listón y alcanzó el asalto final con el partido casi en su mano (66-48). Faltaba cerrarlo y evitar sustos, pero el RVB no se dejó sorprender, aunque sí guardó la ropa y plegó velas.

El cuadro de Jenaro Díaz no capituló ni se dejó ir, como acostumbra, y demostró ser un gran equipo a pesar de los resultados. Pero la renta era amplia y los locales, sin grandes alardes, pero sin dormirse en los laureles, terminaron por certificar el triunfo. Con una ventaja siempre cercana a los 15 puntos, los vallisoletanos, tras una recta final algo trabada y en la que acabó expulsado el entrenador visitante por técnica, acabaron cerrando la noche con un correcto 86-72. Una noche que, más allá del resultado, pasará a la historia de la entidad. La cuarta seguida y quinceava de la temporada. Sin apenas tiempo para saborear el triunfo, el Pucela Basket visitará al Hestia Menorca este martes 12 de marzo a las 20.00 horas.