Una oportunidad perfecta para quitarse las vergüenzas de LaLiga y avanzar en Copa

El Real Valladolid finalizará su concentración en tierras mediterráneas con el duelo copero de este martes ante el Espanyol en el Stage Front Stadium. Un compromiso que previsiblemente servirá para ver en acción a jugadores con menos minutos de competición, y una oportunidad perfecta para que los hombres de Pezzolano se quiten las vergüenzas de la última visita a Cornellá en Liga donde el Pucela cayó derrotado por 2-0 dando una pésima imagen sobre el terreno de juego. Todos ellos buscarán reivindicarse en el marco siempre apetecible de la Copa del Rey, todos ellos intentarán lograr el pase a la siguiente ronda después de la buena puesta en escena ante la Peña Deportiva de Ibiza.

Con las novedades de Montiel y Salazar en la convocatoria en sustitución de Sylla, lesionado en Valencia, Pezzolano armará un equipo competitivo para hacer frente al equipo a priori más poderoso de la categoría de plata del fútbol nacional. Ambos conjuntos llegan al duelo con mal sabor de boca por sus respectivas derrotas ligueras ante el Levante y Oviedo. En este sentido, el técnico uruguayo manifestó que la derrota en el Ciutat de Valencia «ya está pasada» y que ahora la mentalidad pucelana pasa por «sacar lo mejor de nosotros y pasar de fase como queremos». No será la primera vez que el Pucela y los pericos se miden en Copa, y la intención de los blanquivioleta será conseguir su segunda victoria a domicilio. Pezzolano hizo hincapié en que el objetivo es demostrar que el equipo es fuerte para, de ese modo, buscar la clasificación copera en un escenario complicado.

Hay historia entre Real Valladolid y Espanyol en la Copa del Rey ya que en total ambos conjuntos se han visto las caras 13 veces en esta competición, de las que seis de ellas se disputaron en terreno catalán. El balance en Barcelona es más positivo para el conjunto perico, por lo que el Pucela buscará mejorarlo puesto que tan solo se impuso en una ocasión al Espanyol. Fue en la vuelta de la tercera ronda de la temporada 1978/79, en una noche muy especial en Sarriá (1-2) con un golazo de falta de Gilé. Por otro lado, los dos empates fueron con el mismo resultado de 1-1. El primero supuso el estreno de esta historia, allá por la campaña 1957/58, en la que tuvieron que jugar un tercer partido de desempate para decidir la eliminatoria de octavos de final, de la que salió vencedor el Real Valladolid. Mientras, el otro es más reciente, de la 2010/11, pero en ese caso fue el Espanyol quien accedió a los octavos de final tras hacer bueno el 0-2 cosechado en Zorrilla en la ida.

Las tres derrotas restantes se dieron en la vuelta de los dieciseisavos de final de la 1961/62 (2-1), que supuso la eliminación; en la ida de los octavos de la 1990/91 (2-1), con remontada en la vuelta (2-0); y en la misma ronda de la ida de 1998/99 (4-2), en la que el 2-2 de la vuelta no sirvió a los blanquivioleta para pasar. Así las cosas, el Real Valladolid jugará este martes su primer encuentro copero en el Stage Front Stadium, donde disputará una eliminatoria a partido único para escribir un nuevo y diferente capítulo en la historia, en la que espera añadir la segunda victoria en territorio perico.

El encuentro comenzará a las 21.00 horas y será dirigido por el colegiado murciano Lax Franco, sin asistencia desde la sala VOR. El colegiado murciano, nacido en 1991, ascendió este curso a Segunda, por lo que el apasionante duelo contra el Mirandés, que acabó 3-2 en la jornada 10 de LaLiga Hypermotion, fue el del estreno con el Pucela. En aquella alocada victoria blanquivioleta mostró seis tarjetas amarillas, las cuales fueron tres para cada equipo.

Además, en la previa del encuentro se ha conocido el alcance de la lesión de Mamadou Sylla tras ser sustituido en el encuentro ante el Levante, y cuyas pruebas diagnósticas practicadas han confirmado que sufre una lesión muscular grado II en la cabeza larga del bíceps femoral derecho. Sylla abandonó la concentración en tierras mediterráneas y regresó a Valladolid un día para comenzar su proceso de recuperación. El plazo de baja dependerá de su evolución.