El Real Valladolid y el Athletic Club de Bilbao se ven las caras esta noche en Zorrilla, un partido que podríamos denominarlo como un ‘clasicazo’ de nuestro fútbol. Dos equipos a los que les ha costado readaptarse a la competición tras el parón mundialista, dos equipos que buscarán un triunfo que les permita dar un importante paso en una clasificación tan apretada. Los blanquivioleta, por supuesto, tienen la ilusión de volver a demostrar su poderío en Zorrilla, clave sin duda en la pelea por alcanzar la permanencia.
El Pucela suma seis triunfos en casa y aspira a sacarse la espina del partido de ida, celebrado en San Mamés precisamente justo antes de la pausa por la disputa del Campeonato del Mundo. Pacheta contará con las ausencias obligadas de los lesionados Masip, Machis, Amallah, Anuar, y Kenedy, y de los sancionados Roque Mesa y Hongla, que dejan un hueco importante en el centro del campo pucelano.
A pesar de las bajas, el técnico insistió en que su equipo está muy capacitado para derrotar a los vizcaínos y subrayó la importancia del papel de la afición. Pacheta también destacó en la previa del encuentro el buen nivel del rival de este viernes del que puso en valor, por ejemplo, el ritmo de balón alto y preciso, y que cuenta con mucha experiencia en la categoría. El míster blanquivioleta también remarcó la amplia plantilla del conjunto vasco, así como la velocidad de sus delanteros que con haciendo incluso «un partido poco brillante, cuenta con gente que puede resolver en una acción».
De esta manera, el Real Valladolid buscará volver a la senda de la victoria después del amargo tropiezo en Elche el pasado fin de semana que vio como los tres puntos se escapaban cuando lo tenía todo ganado. Una ocasión perfecta para irse al parón con un buen sabor de boca y un colchón de puntos respecto al descenso para alejarse de fantasmas. El encuentro de esta noche será dirigido por el colegiado castellano-manchego Alberola Rojas, auxiliado en el VOR por Estrada Fernández.
