La Policía Nacional ha desarrollado una operación de carácter nacional cuyo principal objetivo ha sido la lucha contra las redes pedófilas de compartición de archivos de material de abuso sexual infantil a través de Internet. Esta investigación, de nombre ‘CÍCLOPE’, se ha constituido como una de las acciones más importantes en la lucha contra la explotación sexual infantil realizado tanto por el elevado número de detenidos, la puesta a salvo de los menores víctimas de graves abusos sexuales, así como la enorme cantidad de material pedófilo intervenido a los 121 usuarios de la red identificados por la Policía Nacional en España, usuarios con una característica común, la plataforma digital de la que hacían uso para obtener y compartir este contenido ilícito.
En total, han sido registrados 125 domicilios distribuidos por toda la geografía española, interviniéndose 46 ordenadores portátiles, 12 ordenadores de sobremesa, 355 discos duros, 38 teléfonos móviles, 5 tablets, 102 memorias USB, más de 100 DVDs y otro material informático en el que se almacenaban teras de material de contenido pornográfico protagonizados por menores de edad de extrema dureza, en los que se mostraban actividad explícita sexual. La investigación se inició a mediados de 2019 con usuarios investigados en base a la geolocalización de las IP’s por todo el territorio nacional, involucrando a un total de 46 unidades territoriales especializadas en la investigación tecnológica. Este macro operativo se cierra con un total de 121 detenidos, de los cuales 118 son hombres y 3 mujeres, tras la materialización de 125 entradas y registros tanto en domicilios como en los lugares de trabajo de algunos detenidos.
En el marco de esta operación se practicó tres registros en la provincia de Valladolid, uno en Valladolid capital y las otros dos en las localidades de Medina del Campo y Aldeamayor de San Martin, con el resultado de tres personas detenidas por los delitos de posesión y distribución de pornografía infantil. Además, se destaca que en el registro practicado en Valladolid se intervinieron dos discos duros de 2 TB y una memoria de 32 GB. En el análisis de los dispositivos encontrados en un primer análisis no se encontró ningún archivo con contenido pornográfico infantil. Sin embargo por la experiencia de los investigadores y la actitud del detenido se realizó un registro muy exhaustivo de la vivienda encontrándose finalmente oculto en una caja de libros un disco duro de 1 TB con más de 1.500 archivos de video y un pendrive de 32 GB con otros 71 archivos de video.
El detenido en Valladolid posteriormente confesó a los investigadores que eliminaba cualquier rastro de pornografía infantil de su ordenador, guardando y ocultando los archivos en lugares poco comunes ante un eventual registro de las autoridades. El detenido tenía antecedentes por exhibicionismo y provocación sexual del año 1996 y había sido investigado por un delito de corrupción de menores a través de Internet por la Guardia Civil en el año 2011. Se significa que algunos de los videos son de gran calidad y otros mostraban a niños de muy corta edad siendo agredidos sexualmente por adultos. Asimismo el detenido era muy metódico y clasificaba los archivos de video en carpetas y subcarpetas que hacían referencia a su distinto contenido pedófilo, lo que indicaba una especial depravación. El detenido, que se trataba de un jubilado, pasó a disposición judicial decretando el Juzgado su ingreso en prisión preventiva y sin fianza.
Por otro lado, y en el marco de la operación ‘CÍCLOPE’ destacan algunas de las detenciones llevadas a cabo durante el desarrollo de esta investigación. Se logró en Madrid la detención de un español de 54 años, al que se le intervinieron más de dos millones de archivos de graves abusos sexuales cometidos sobre niñas de muy corta edad. En Alicante a su vez es detenido un varón de 57 años, al que entre el material pedófilo que descargaba y distribuía, los agentes intervinientes localizaron una gran cantidad de archivos de imágenes explícitamente sexuales de dos menores varones que habían sido tomadas en la habitación del detenido por él mismo iniciándose el proceso de identificación y localización de las víctimas.
