En una temporada de promoción de jugadores en las categorías inferiores del Real Valladolid, el Promesas aportó varias piezas al primer equipo, pero también dio la oportunidad a los jóvenes que vienen por detrás. Un proyecto que tendrá su continuidad con Julio Baptista al frente. Esta será la quinta campaña del técnico brasileño en la cantera del Real Valladolid, a la que llegó en el verano de 2019 para asumir las riendas del Juvenil B, y la tercera al frente del Real Valladolid Promesas.
Lo hará de nuevo en Segunda Federación, después de quedarse a las puertas de la final por el ascenso. Precisamente, el futuro de Baptista ha estado en las últimas temporadas siempre en entredicho por parte de la afición pucelana que veían con buenos ojos un cambio de aires en el banquillo del filial. Mientras, el entrenador de porteros, Adrián Mondéjar, y el analista David Crespo no continuarán en el staff técnico. El Club les agradece su entrega durante su tiempo como blanquivioletas y les desea la mejor de las suertes en sus nuevas etapas personales y profesionales.
Por otro lado, el filial blanquivioleta pasará a formar parte de la dirección de cantera, mientras que la dirección deportiva se centrará en el primer equipo y en aquellos jugadores del Promesas que trabajarán a las órdenes de Pezzolano, algo habitual en la metodología del técnico uruguayo. Un proyecto de categorías inferiores que seguirá teniendo como principal objetivo adelantar procesos de los jugadores potenciales, como ya se demostró en la temporada recién terminada con la promoción de 41 futbolistas.
