Punto y final a la polémica del ‘famoso’ retuit que ha rodeado la actualidad municipal en estas últimas semanas. El alcalde de Valladolid, Óscar Puente, ha mostrado este martes en el Pleno su intención de dar por «zanjado» el retuit por parte del Grupo Municipal Popular que alentaba a tomar el Ayuntamiento de la ciudad y a acabar con el alcalde al «estilo Mussolini» si los populares apoyaban la moción presentada al Pleno en la que además de condenar la «emisión y difusión» del tuit, se condenaba también la «justificación», como finalmente ha sucedido ya que la propuesta planteada ha salido adelante por unanimidad.
En dicho acuerdo, debatido en el Pleno municipal celebrado este martes se ha aprobado tamibén un mensaje de solidaridad con el propio alcalde con 26 votos a favor, ya que la concejal socialista María Victoria Soto no ha podido participar en la sesión ya que debía regresar a esta hora en un vuelo procedente de Alemania a donde había llegado tras encontrarse atrapada en en Sudáfrica por la situación sanitaria junto a otros doce vallisoletanos.
Puente ha mostrado su clara intención de dar por «zanjado» el asunto y antes de ello ha subrayado que para él resultaba un tema central la «justificación» que el equipo de Gobierno consideraba que había hecho el PP en Twitter, pues el mensaje, entiende le pone «en riesgo» a él y a su familia y se ha defendido asegurando que no quiere que «nadie de esta corporación» se vea en una situación similar.
En este punto no ha habido acuerdo con los grupos de la oposición y el punto ha salido adelante solo con los 13 votos a favor del equipo de Gobierno formado por PSOE y VTLP. Por su parte, Ciudadanos se ha abstenido y PP y Vox han votado en contra. En este sentido, la oposición ha querido dar un tirón de orejas remarcando que desde los partidos que gobiernan en el Ayuntamiento han pretendido «estirar el chicle» de la polémica, algo que a juicio, «no es lo que realmente interesa a la ciudadanía». Ante este reproche, Puente se ha defendido asegurando que no tiene «chicle que estirar» sino que siente «una profunda tristeza», al tiempo que ha reconocido que ha «afectado» en los últimos días y quiere pasar página.
Por su parte, la presidenta del Grupo Popular ha añadido una defensa de la jefa de prensa popular, Raquel Sanz, a quien ha seguido considerando responsable «única» del retuit pero ha remarcado en que «a poco que se conozca su biografía» y que ella misma ha sufrido el «odio en las redes sociales» debería estar claro que fue un «error» que no tenía «mala fe» ni intención de hacer daño al alcalde. Asimismo, Del Olmo ha reiterado su petición de disculpas «totales y sin ambages» de una «posiblemente mala» gestión de los mensajes de disculpas formulados por el partido después del retuit.
