El grupo municipal Valladolid Toma la Palabra ha mantenido este martes una reunión con el subdelegado del Gobierno, Jacinto Canales, para valorar la situación actual del proyecto de centro de personas refugiadas que propone el Ministerio de Seguridad Social y Migraciones y la «falta de claridad» del equipo de Gobierno de PP y Vox sobre este proyecto. En primer lugar, VTLP considera que el Ayuntamiento de Valladolid decidió «alargar la decisión un año hasta octubre de 2024, y recientemente, con las declaraciones de Carnero de que ya es un proyecto que no interesa a la ciudad«.
Para intentar desbloquear esta situación, VTLP ha planteado al subdelegado del Gobierno en Valladolid trasladar al Ministerio la posibilidad de dar uso al colegio Santiago, situado en la Calle Muro, que desde 2022 está cerrado, sin uso y que pertenece al Ministerio de Defensa, al Patronato de Huérfanos del Ejército. «Esta opción ha sido valorada favorablemente por varios colectivos sociales de la ciudad, y en particular, por la Federación de Vecinos Antonio Machado», ha expuesto la portavoz de VTLP, Rocío Anguita. «Dicho edificio ha sido usado como residencia de estudiantes y se encuentra en perfectas condiciones para ser ocupado de nuevo, conteniendo unas excelentes instalaciones deportivas, así como todo tipo de servicios», ha señalado.
Por último, desde Valladolid Toma La Palabra creen es una «buena oportunidad» de dar uso social a un edificio de titularidad pública, así como de «demostrar que Valladolid sigue siendo una ciudad de refugio y acogida, tal y como acordó el Pleno municipal hace años», ha concluido Anguita. Actualmente, el proyecto del centro de refugiados está en stand by después de que el Gobierno renunciara al proyecto a finales de año de ubicar el centro en la zona del Río Hortega en Las Delicias, a su juicio, por no recibir respuesta por parte del Ayuntamiento de Valladolid. Recientemente, el subdelegado del Gobierno ha vuelto a poner sobre la mesa la iniciativa del Ministerio aunque el alcalde apuntó a que este proyecto «no está en la agenda» de la ciudad.
