El Ayuntamiento de Valladolid ha iniciado este jueves la Mesa Municipal de la Automoción, como «símbolo de compromiso y apoyo» por parte del Gobierno municipal al sector industrial de la ciudad y el cómputo de empresas que lo componen actualmente. El alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, ha presidido la sesión constitutiva junto a la primera teniente de alcalde, Irene Carvajal, y el concejal de Tráfico y Movilidad, Alberto Gutiérrez Alberca, en la que se ha destacado la formación de una «alianza sólida» para consolidar la posición de la ciudad como «referente industrial» del vehículo sostenible e inteligente. De esta manera, el regidor ha anunciado los siete compromisos que tiene por delante el Ayuntamiento de Valladolid para hacer frente a los retos compartidos también por el conjunto de la industria vallisoletana del sector, como son el reto humano, ambiental y tecnológico. Esta primera reunión de la Mesa Municipal de la Automoción ha contado con el respaldo de los representantes empresariales y sociales, del ámbito académico y de la investigación que integran en Valladolid el ecosistema de la automoción, como los responsables de Michelín, IVECO, Renault, Lingotes Especiales, Industrias Maxi, CEOE, Cartif, Cámara de Comercio, Cidaut, Universidad de Valladolid, Universidad Miguel de Cervantes y los sindicatos UGT y CCOO.
Tras la reunión que ha durado alrededor de 90 minutos, el alcalde de Valladolid ha comparecido para manifestar que la Mesa Municipal de la Automoción nace con el objetivo prioritario de «brindar todo el apoyo institucional del Ayuntamiento al sector industrial de mayor peso específico, generando más de 20.000 puestos de trabajo directos en Valladolid. Un sector que integra a fabricantes de vehículos automóviles ligeros e industriales, a fabricantes de neumáticos, a la industria auxiliar y de componentes vinculada, al sector de la distribución, etc. Un sector vital para Valladolid, de gran relevancia, cuyo devenir está relacionado directamente con el talento, con las capacidades y con las competencias. Y aquí entra en juego la formación, responsabilidad de las universidades y de los centros de formación profesional; y los proyectos de innovación aplicada, que llevan a cabo los centros tecnológicos».
En este sentido, Jesús Julio Carnero ha señalado que «es preciso establecer un canal de comunicación fluido y directo con todos los actores que intervienen en el sector, condicionado por marcadas directrices, a nivel europeo, nacional y regional, y sometido a las tensiones geopolíticas y macroeconómicas del momento». Previamente, hace unas semanas, el regidor vallisoletano ha mantenido reuniones y contactos con las factorías de Michelin, Renault e Iveco ubicadas en la ciudad, con el objetivo de establecer los retos comunes que deben afrontar en el futuro inmediato. Con respecto a los siete compromisos que Carnero ha enumerado y que deben cumplir todo los componentes pasa por «el capital humano, la sostenibilidad y la digitalización».
En lo que respecta al primero de los retos, Carnero ha afirmado que «en el capital humano radica una de las ventajas competitivas que presenta la ciudad de Valladolid frente a otros emplazamientos que pueden resultar atractivos para la industria automovilística. Un capital humano que debe incorporar el talento como eje prioritario, de manera que superar con éxito este reto pasa por rubricar una alianza estrecha entre el sector educativo y la empresa». Así, el alcalde ha remarcado que «los estudiantes pueden conocer la importancia del sector en la ciudad y que aquí, en su casa, tienen una profesión de futuro en torno a las ingenierías industriales, telecomunicaciones o informática». En cuanto al reto medioambiental, el alcalde ha hecho alusión a que la preocupación por el clima, el medio ambiente y la sostenibilidad condicionan decisivamente el futuro del sector de la automoción en todo el mundo y ha recordado que Valladolid es una ciudad firmante del Acuerdo Climático que marca los objetivos de descarbonización para 2030. «En este camino, si obtuviéramos el ‘Sello Misión’, se abrirían aún más las puertas de la financiación europea para la industria local de diversos sectores, entre ellos el de la automoción», remarcó.
En este contexto, el regidor ha insistido en la «defensa» de una «transición ordenada y progresiva hacia una neutralidad en las emisiones» para contar con oportunidades en el sector de la automoción y por ende, en Valladolid. Asimismo, ha subrayado «el defender el aplazamiento de la implementación de la normativa EURO 7 y cuestionar el plazo de 2035 para la prohibición de venta de coches que no sean exclusivamente eléctricos, para abrir en el seno de la UE un debate y reflexión que plantee plazos más realistas e incluya nuevos carburantes, como los sintéticos». Otro de los puntos clave es la «descarbonización en el sector del transporte y en la industria de la automoción» con la electrificación, el uso del hidrógeno como combustible propulsor, los biocombustibles, los combustibles sintéticos o el gas. En esta línea, Carnero ha destacado que «Valladolid debe albergar una gran factoría y un centro de I+D de baterías. Los PERTE de vehículo eléctrico han puesto de manifiesto la competitividad existente entre ciudades para captar factorías de fabricación y/o ensamblaje de baterías para vehículos eléctricos. Valladolid debe contar con una gran industria en este campo y un centro tecnológico de vanguardia en el mismo». Cabe destacar también la ubicación estratégica de la ciudad de Valladolid, situada en el Corredor Atlántico de la Red Transeuropea de Transportes.
Frente a estos tres grandes retos compartidos por el sector de la automoción en Valladolid, el Ayuntamiento se compromete a los siete aspectos como son la interlocución con las universidades y centros educativos de formación profesional para trasladar las necesidades formativas que requiere el sector; defender una transición ordenada de la industria de la automoción hacia la descarbonización del transporte, la neutralidad climática y la reducción de emisiones; una ciudad para proyectos-piloto empresariales vinculados al vehículo conectado, vehículo autónomo, gemelo digital, inteligencia artificial; la creación de un Sandbox de Movilidad, un entorno real de pruebas controlado en vías públicas; circuito urbano de pruebas reales de vehículo conectado; una oficina del Vehículo Eléctrico, ubicada en la Agencia de Innovación y Desarrollo Económico de Valladolid (IdeVa), que actuará como facilitadora de la interlocución y captación de la colaboración público-privada y servicio de apoyo a la captación de subvenciones, inversiones y proyectos, por medio de la Oficina de Proyectos y Atracción de Inversiones.
«Se trata de aprovechar las oportunidades que brinda la elección de Valladolid por la Unión Europea como ciudad Misión de Neutralidad Climática y Descarbonización», ha remarcado Carnero. En definitiva, ha concluido el alcalde de Valladolid, «el Ayuntamiento entiende la Mesa de la Automoción como la vía para canalizar todos sus recursos y posibilidades de apoyo a las necesidades del sector local de automoción y componentes ante los retos existentes en la actualidad. Todo ello, en el marco legal de las competencias que le asisten y en colaboración estrecha con la Junta de Castilla y León, con el objetivo último de consolidar Valladolid como un referente industrial del vehículo sostenible e inteligente». Asimismo, ha explicado que si finalmente Switch Mobility e Inobat instalan sus fábricas en la capital vallisoletana se les ofrecerá asiento para formar parte de la Mesa de la Automoción.