El Balonmano Atlético Valladolid cayó este domingo ante un rival directo, el Helvetia Anaitasuna en un encuentro en el que el cuadro navarro fue ganando durante todo el desarrollo del mismo. La cita tuvo un elevado número de goles como viene siendo habitual cuando se enfrentan ambos conjuntos, aunque los locales pronto marcaron diferencias y llegaron a ir ganando por diez goles. El conjunto pucelano se estrelló en el inspirado portero del Anaitasuna, Juan Bar, y en la sólida defensa de un rival muy efectivo también en ataque, que aprovechó las pérdidas y anotó sus 7 lanzamientos de penalti. Sin embargo, en el sprint final el esfuerzo y voluntad de los gladiadores azules les permitieron ponerse a tres goles de su rival, pero no pudieron ir más allá en una remontada que hubiera sido épica.
Lo cierto es que la primera mitad fue claramente dominada por un espléndido cuadro local con un excelente Juan Bar bajo palos que detuvo penaltis y fue un muro para el ataque de los gladiadores azules, que salieron fríos al partido. En un periodo donde se sucedieron las exclusiones para ambos conjuntos, desde el 7-3 del minuto 9, el Anaitasuna fue dueño del choque con una defensa agresiva y un alto nivel de anotación dirigido por un excelente Ander Torriko desde el centro. El Atlético Valladolid llegó a estar a dos tantos, pero entre la defensa navarra y Juan Bar en portería, excelente el que será jugador del conjunto de Pisonero la próxima campaña con una efectividad del 42% y 8 paradas, desbarataban el poder ofensivo vallisoletano que además encajaba tantos a portería vacía.
Además con un parcial de 5-0, que le daba la máxima renta del choque hasta ese momento, 15-8 en el 23′, Anaitasuna parecía tener el choque dominado y se marchó a vestuarios manteniendo los 7 goles de renta. En el inicio de la segunda parte no parecían mejorar las cosas. El Helvetia Anaitasuna salió en tromba y pronto se puso con 9 goles arriba. Gracias a su férreo 6:0 recuperaba balones y podía salir en transición manteniendo sus buenos porcentajes de efectividad con el lateral derecho Aitor Albizu, 11 goles al final, destacado. De esta forma el encuentro entraba en su último cuarto de hora con el Anaitasuna diez tantos por delante 32-22 y con pocas esperanzas de seguir en partido para los de Pisonero.
Un 0-3 de parcial que ponía a los vallisoletanos a 7, fue cortado por un tiempo muerto de Quique Domínguez. Sin embargo, los gladiadores azules, con Dimitrievski y Álvaro Martínez liderando la ofensiva, apretaron las clavijas atrás en un último intento, presionaron al balón y llegaron a ponerse a tres, pero el Balonmano Atlético Valladolid se quedó sin tiempo para culminar la hazaña de la remontada rompiendo su racha de tres victorias seguidas y el Anaitasuna se llevó justamente el triunfo y average por 39-35.
