La Semana Santa de Castilla y León busca atraer a jóvenes y nuevos públicos: «Esta tradición está más vigente que nunca»

La Semana Santa de Castilla y León busca este año atraer a nuevos públicos y especialmente a los más jóvenes. Así lo ha anunciado este viernes el vicepresidente de la Junta durante la presentación en Madrid de la nueva campaña promocional, ‘Castilla y León es Pasión’, en la Real Fábrica de Tapices. Juan García-Gallardo ha destacado que esta celebración «no es una experiencia turística más», sino que «la Semana Santa permite reencontrarnos con lo más hondo de nuestras raíces», aseguró el vicepresidente. Y esto puede conectar bien con unos jóvenes «que tienen hambre de tradición y de espiritualidad». Castilla y León ofrece en estos días unas «experiencias únicas» que conjugan la tradición, la cultura y el arte a través de las procesiones. A todo ello hay que añadir la riqueza de los otros recursos, como la gastronomía, el enoturismo o la naturaleza.

Durante la presentación se puso de manifiesto que la Comunidad es líder en celebraciones de Semana Santa declaradas de interés turístico internacional. Ocho de sus semanas santas tienen este distintivo como Valladolid, Zamora, Ávila, León, Palencia, Salamanca, Medina de Rioseco y Medina del Campo, del que también goza la Ronda y la Procesión de los Pasos en León. A todo lo mencionado hay que añadir otras cuatro reconocidas como de Interés Turístico Nacional como Burgos, Astorga, Ponferrada y Segovia, y la Bajada del Ángel de Peñafiel, que también disfruta de esta distinción. Y otros diecisiete actos particulares más están reconocidos como de Interés Turístico Regional, como es el caso del Viacrucis Juvenil de la localidad vallisoletana de Fresno el Viejo. En total, 31 distinciones y el número sigue creciendo.

«Esta tradición está más vigente que nunca. Frente a lo que afirman unos pocos que quieren presentarla como obsoleta, la Semana Santa está muy viva«, expresó. El vicepresidente de la Junta resaltó el carácter «excepcional» de esta celebración en la Comunidad, «en cada castellano y leonés la Semana Santa ha dejado una huella distinta, en muchos casos, muy profunda», explicó. La campaña promocional de este año prestará especial atención a las redes sociales con el fin de llegar a los jóvenes y a públicos que hasta ahora no se han interesado por esta celebración. Con este objetivo, se han elaborado pequeñas piezas en las que se muestra el modo como Castilla y León se prepara para vivir este rito. Ya el año pasado se lograron buenos resultados con la campaña de promoción que la Consejería de Cultura, Turismo y Deporte puso en marcha en colaboración con el grupo musical Siloé, y este año se pretende reforzar esta apuesta.

El vicepresidente de la Junta destacó también otros atractivos añadidos de estos días porque en Semana Santa en Castilla y León se realiza también un programa de apertura de monumentos que permite la visita de muchas iglesias, ermitas y monasterios que durante el año permanecen cerrados, por encontrarse en pequeñas localidades. Este programa se realiza en colaboración con las diócesis de Castilla y León, a través de voluntarios, que abren estos espacios en horarios homogéneos. El programa de este año se realizará del 23 de marzo al 1 de abril, con más de 300 monumentos abiertos, que posibilitarán a los visitantes la realización de diversas rutas turísticas para conocer mejor los recursos culturales y artísticos de la Comunidad de Castilla y León.

Por otro lado, el vicepresidente ha celebrado hoy también los datos de turismo correspondientes al mes de enero, que presentan nuevamente a la Comunidad como líder en turismo rural. Castilla y León ha crecido en pernoctaciones con 61.797, un 5,2% más, y en viajeros con 29.238, lo que supone un 6,3% más con respecto a enero del año pasado, según la encuesta de ocupación en alojamientos turísticos extrahoteleros publicada por el INE. El incremento de Castilla y León contrasta con la caída del conjunto de España, tanto en pernoctaciones, donde bajó un 7,2 %, al pasar de 410.555 a 380.798, como de los viajeros, que se redujeron un 5,4 %, al caer de 165.458 a 156.492.