En nuestro paseo por los castillos y fortalezas de la provincia de Valladolid no podía faltar Trigueros del Valle. Esta localidad vallisoletana, además de contar con una prestigiosa edificación del siglo XV, y convirtiéndose en el epicentro de criaturas fantásticas. Actualmente, el Castillo que forma parte de la reconocida ruta de las fortalezas de Valladolid acoge una exposición permanente de misterio y que ha llevado a conocer al edificio como el Castillo Encantado con centenares de visitantes que quedan asombrados de lo vivido en el interior de esta emblemática fortaleza. El origen de este Castillo se remonta a 1427 por construcción de las familias Robles y Guevara cuyos escudos heráldicos se pueden ver en la entrada del monumento.
Los dueños no eran precisamente muy amigables con los vecinos de Trigueros del Valle, y provocó varios asaltos de los habitantes al castillo, el último se produjo durante la Guerra de las Comunidades. Un acontecimiento histórico que actualmente se recrea en el municipio y se ha convertido en una fiesta popular. Poco después, los daños se reparan y la barrera se adapta al uso de la artillería. Al recinto principal y más antiguo se entra bajo una torre defensiva que presenta una gran tronera accesible desde los adarves, a los que la torre está unida con un corredor alojado en el muro. La estructura reaparece en la torre del homenaje, optimizando la defensa y la edificación doméstica se adosaba a los muros del recinto. El castillo presenta un singular despliegue de grandes caballerizas subterráneas en forma de bóveda.
A principios del siglo XX, el castillo, que no estaba en buen estado de conservación, pasó a ser propiedad del Ayuntamiento de Trigueros del Valle que restauró el interior. Actualmente sigue siendo del municipio, y alberga la exposición permanente El Castillo Encantado. Creada por el escultor Juan Villa es apta para todos los públicos y en ella se puede disfrutar de dragones, sirenas, unicornios, animales de fantasía, pasadizos ocultos e incluso mazmorras.
