El Ayuntamiento de Valladolid ha trabajado «directamente» con INOBAT y con interlocución con el Gobierno de España para conseguir que la empresa de origen eslovaco ubique su nueva factoría en la ciudad. El alcalde, Óscar Puente, ha dejado clara la gestión realizada durante los últimos meses, que queda en evidencia en el documento suscrito ayer con la Junta de Castilla y León, y que supondrá la construcción de la fábrica de baterías sobre 80 hectáreas y una inversión de 3.000 millones de euros.
El Ayuntamiento de Valladolid ya es propietario de la parte del suelo con 50 hectáreas donde se asentará la primera fase y se realizarán todos los trámites administrativos y urbanísticos para lograr todo el terreno colindante de la zona de Palomares-Arenas, entre la Avenida Santander y la Ronda exterior y frente a las parcelas donde se ubicará Switch Mobility. «Valladolid es un lugar del máximo interés para la localización de empresas», según ha declarado el alcalde, que ha exhibido la agilidad administrativa y la celeridad en la tramitación como ejemplo de la buena gestión municipal.
INOBAT tiene previsto iniciar su producción en el año 2025 y el objetivo es producir baterías para automoción pero también de alto almacenamiento energético. La apuesta de la compañía contempla el desarrollo de baterías de alto almacenamiento energético para retener todas las energías renovables, tanto eólica como solar. La naves alcanzarán los 46.000 metros cuadrados de huella y 20 metros de altura. En la primera fase sumarán 8 gigavatios de capacidad de almacenamiento y de producción de baterías que se elevará a 32 en 2029, año en el que la macrofábrica de baterías alcanzaría su máxima potencia de producción.
En dicha comparecencia, el concejal de Planeamiento Urbanístico y Vivienda, Manuel Saravia, ha pormenorizado las razones que explican que Valladolid sea una «ciudad atractiva» para invertir. En este sentido, el edil de Toma la Palabra ha destacado desde las infraestructuras existentes como ferrocarril o autovías, las proyectadas como la estación intermodal, al igual que la dotación de suelo industrial, la disponibilidad de mano de obra cualificada, el clima social y económico, hasta la posición de las administraciones para apoyar los proyectos empresariales innovadores y sostenibles.