Comienza una semana clave en el caso de Esther López después de que la investigación haya puesto en el punto de mira a Óscar S., el amigo de la joven de Traspinedo que fue la última persona que la vio con vida. La Guardia Civil lleva durante todo el fin de semana, con tres jornadas sin descanso, realizando un exhaustivo registro de la vivienda del hombre, propiedad de sus padres, en la localidad vallisoletana. La Unidad Criminalística de la Guardia Civil inspecciona palmo a palmo el domicilio en busca de restos de ADN de Esther que puedan comprobar que el cadáver de la mujer estuvo allí.
Este lunes, se ha retomado el rastreo que durante estos días han durado hasta 12 horas y la Guardia Civil ha incorporado a los perros guía que han investigado otros casos de desaparición y muerte como el suceso de las niñas de Tenerife, Anna y Olivia, que fueron secuestradas y asesinadas por su padre. Los perros Dilan y Junco han participado en el registro para inspeccionar todo los rincones del inmueble del principal sospechoso de la muerte de Esther López, que se sitúa en la urbanización El Romeral de Traspinedo, entre las calles Pimpollas y Dos.
Hace más de dos meses que el cuerpo de Esther López apareció sin vida en una cuneta de una carretera de acceso al pueblo de Traspinedo y a escasos metros de la casa de Óscar, el hombre investigado. Ahora, la investigación ha dado un giro de 180 grados dejando atrás las primeras hipótesis y centrándose en un atropello, como causa de la muerte, por parte de Óscar, aunque no mortal. Los investigadores creen que Óscar la atropelló y la dejó morir tras una fuerte discusión, ya que las lesiones de la joven no fueron mortales por el imparto, sino que murió a causa de una hemorragia interna por no ser atendida de urgencia.
Los agentes que llevan el caso confían que esta semana sea clave para esclarecer qué ocurrió con Esther la madrugada del 13 de enero y si Óscar S., está detrás del caso que mantiene en vilo a los vecinos de Traspinedo y de Valladolid. Asimismo, la Guardia Civil también ha inspeccionado el coche del sospechoso hallando restos biológicos de la joven en el maletero. La Benemérita ha enviado piezas del vehículo Volkswagen T-Roc de la parte frontal y trasera por si ha sufrido alteraciones por su propietario, ya que coincide con un tipo de turismo alto que pudo provocarle las heridas que presentaba el cadáver de Esther.
