El presidente de la Diputación de Valladolid, Conrado Íscar, ha visitado este lunes 22 de enero las localidades de Rábano y Viana de Cega, dos de los municipios más afectados por la crecida de los ríos acaecidas este fin de semana. Durante las visitas, en las que también acudió la delegada territorial de la Junta, Raquel Alonso, además de conocer de primera mano los daños causados en las zonas más afectadas, ha mantenido un encuentro con los alcaldes, Juan García Benito y Alberto Collantes, respectivamente, en el que ha vuelto a poner de manifiesto la puesta a disposición por parte de la Diputación de los servicios de Extinción de Incendios y Protección Civil y de Carreteras para garantizar la vuelta a la normalidad lo antes posible en los municipios afectados.
De hecho, hoy mismo el Servicio de Carreteras estaba procediendo ya al barrido y limpieza de las calles de Rábano. En este sentido, Íscar ha querido destacar el trabajo realizado este fin de semana por ambos Servicios «que han estado alerta en todo momento y que han intervenido para evitar daños personales en una decena de municipios de la provincia, con especial incidencia en Rábano y Viana de Cega, donde ha sido necesario desalojar a personas ante los problemas generados por la crecida«. El resto de localidades donde ha sido necesario intervenir con tareas preventivas o con inundaciones que no han afectado directamente al desalojo de personas han sido Castrejón de Trabancos, Fresno el Viejo, Medina del Campo, Megeces, Mojados, Peñafiel y Valdestillas.
Durante la visita, Conrado Íscar ha anunciado que la Diputación de Valladolid pedirá al Gobierno de España la declaración de zona catastrófica para las diferentes zonas de la provincia afectadas por las inundaciones, especialmente las más perjudicadas por la crecida de los ríos Duratón, Cega, Zapardiel, Trabancos, Adaja, Esgueva y Duero. En la petición «se solicitarán ayudas para compensar los daños en las infraestructuras existentes, y de manera muy especial, paliar los daños económicos sufridos por las empresas afectadas, mayoritariamente explotaciones agrícolas y ganaderas«. Asimismo, el presidente ha anunciado que «la Diputación de Valladolid habilitará de manera urgente una línea de ayudas destinadas a que los ayuntamientos puedan paliar los daños sufridos en sus instalaciones municipales».
Por último, Conrado Íscar ha vuelto a reclamar a la Confederación Hidrográfica del Duero la puesta en marcha de labores preventivas como la limpieza de los cauces para evitar incidentes en los ríos: «Es algo que los alcaldes venimos reclamando históricamente«. En esta línea, el presidente provincial ha advertido que «la falta de limpieza no es la única causa de las inundaciones, pero sin duda las agrava, como también la falta de información que recibimos, lo que complica que podamos tomar medidas preventivas en nuestros municipios», ha concluido.
