España empieza el Mundial con una victoria apabullante

Nunca en la casi centenaria historia mundialista de la Selección, España había ganado por siete goles, ni anotado tres en media hora y mucho menos en el partido inicial, que el equipo de todos no superaba con victoria desde hacía 16 años. Ningún equipo en lo que llevamos de Mundial ha ganado por esta diferencia de goles y nunca jamás en la historia de este torneo una selección había sido capaz de completar 549 pases durante un primer tiempo para acabar el partido con más de mil.

Son los datos contundentes e irrefutables que enmarcan un triunfo para el recuerdo como el logrado este miércoles por La Roja, quien no ha dado opción a la experimentada Costa Rica sobre el verde catarí con un tremendo 7-0 en el marcador. De inicio, el seleccionador optaba por colocar a Azpilicueta en el lateral diestro y Dani Olmo arriba, quien pronto comenzaba a combinar con Pedri para generar la primera gran ocasión a los cinco minutos.

Con Sergio Busquets sentando cátedra en la medular enlazando con la verticalidad de Gavi, Pedri y Asensio, España rondaba un gol que se iba a demorar once minutos hasta que Dani Olmo acunaba con calidad la pelota dentro del área para batir acto seguido a Navas en su salida. España ha pulverizado en este encuentro una larga relación de registros históricos y del presente Mundial, donde nadie ha logrado aún un triunfo tan contundente

Un gol que iba a abrir una goleada histórica, la más amplia de la historia en un Mundial, que ha sido posible gracias a un principio irrenunciable marcado por el seleccionador español: jugar en todo momento como si el partido acabase de empezar. Y así el chaparrón de fútbol iba a continuar sin pausa con Marco Asensio rematando de primeras un servicio de Jordi Alba a los 21 minutos y Ferran Torres anotando de penalti un claro derribo al lateral zurdo español.

El valenciano es ya el máximo goleador de la era Luis Enrique, ampliando su cuenta ya en el segundo acto, antes de que el gaditano Gavi se convirtiese con un derechazo en el tercer anotador más joven en la historia de la Copa del Mundo, el brasileño Pelé es el primero. Al festival se unía la buena noticia del debut de Alejandro Balde y dos nuevos goles en las botas de Carlos Soler y Álvaro Morata, quien supera así en la tabla histórica a Fernando Morientes.

Todo un carrusel de registros que contribuyen a lo más importante, alimentar la esperanza colectiva en la mejor competición del planeta fútbol, donde Alemania, aguarda el próximo domingo como próximo e inminente desafío.