Entra en funcionamiento el nuevo Parque de Vías Públicas de Valladolid con unas instalaciones de más 3.000 metros cuadrados

El alcalde, Óscar Puente, junto con el concejal de Movilidad y Espacio Urbano, Luis Vélez, y la concejala de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible, María Sánchez, han inaugurado la segunda fase del nuevo Parque de Vías Públicas de la ciudad, así como la urbanización del entorno. Durante la visita, además, han estado acompañados por el jefe del Servicio de Espacio Público e Infraestructuras, Francisco Pérez, y los directores de obras Ángel Cuevas y Susana Poyatos, además de otros técnicos municipales.

Estas magníficas instalaciones, que ya se están utilizando por el personal municipal, han contado con una inversión total de 3’6 millones de euros, convirtiéndose en uno de las mejores instalaciones de Parques de Vías Públicas de España, gestionado directamente por el propio Ayuntamiento. El pasado 18 de diciembre de 2019 se inauguró una primera fase de estas instalaciones con el fin del traslado del Servicio de Espacio Público e Infraestructuras (SEPI) que respondía a la necesidad urgente de reubicar las instalaciones distribuidas hasta entonces entre el Soto de Medinilla y las de la calle de las Eras, ya obsoletas e insuficientes.

En el solar donde se ubicaron estas últimas, actualmente se están construyendo dos edificios residenciales y un espacio libre para uso y disfrute del barrio. La actual ubicación se eligió por su localización estratégica entre la Avenida de Burgos y la Ronda Norte, que reduce notablemente el gasto de tiempo en desplazamientos y además dispone de un amplio espacio como campa de la parcela anexa al otro lado del camino de los Mártires, para acopio de material del Centro de Conservación de la Vía Pública.

La primera fase consta de dos edificios exentos de una única planta en el extremo noroeste de las parcelas unidos por una zona cubierta para los trabajos de taller que requieran realizarse en el exterior. El primer edificio aloja las oficinas, vestuarios, sala multifuncional y aseos, entre otros; mientras que el segundo edificio contiene el almacén y el taller de forja, y el garaje de maquinaria, que se desplaza a una nueva ubicación en la segunda fase.

Recientemente también se ha instalado en la cubierta de esta nave una dotación de 66 paneles fotovoltaicos con una potencia nominal total de 30Kw para autoconsumo. Con esta segunda fase, se completan las instalaciones municipales con la ampliación de la nave 2 en 844 metros cuadrados de superficie construida, con más espacio de almacén para la brigada de forja, un aparcamiento con cargadores para los vehículos eléctricos municipales y con un nuevo taller y almacén para el Centro de Alumbrado Público; la construcción de una nave de garaje para vehículos pesados de 1.005 metros cuadrados construidos.

Con esta última obra, las instalaciones se amplían hasta alcanzar una superficie construida total -incluyendo la fase I-, de 3.346,50 metros cuadrados más los 240,78 metros cuadrados de espacio exterior cubierto. A lo largo de toda esta ampliación se ha replicado la modulación de los lucernarios que se encargan de dotar de luz cenital a las zonas de trabajo. Además, se ha ejecutado la urbanización del espacio libre público que separa estas instalaciones de la Ronda Norte. Agotado el uso de la parcela con la edificación y con la campa de almacenamiento de materiales, quedaba una banda de aproximadamente 35 metros, de ancho, entre el final de la plataforma de la Ronda VA-20 y el límite de las edificaciones.

Desde el punto de vista de las infraestructuras, las necesidades a satisfacer han sido por un lado el cierre y mallado de la red de abastecimiento desde el acceso a la Overuela hasta la calle Traductores, renovando una de las acometidas de Michelin, y por otro, desde el punto de vista viario, el dotar de un aparcamiento disuasorio a la entrada de la ciudad con accesos directos desde la Ronda Norte VA-20. Es por ello que en la franja de terreno que se ha urbanizado se han creado 250 plazas de aparcamiento. Estas plazas, en principio destinadas a turismos, podrán ser modificadas para ser empleadas por camiones pesados.

Por tanto, para dar un servicio adecuado al estacionamiento, se ha construido un vial longitudinal paralelo a la Ronda Norte (VA-20), de unos 500 metros de longitud, que completa la conexión viaria municipal a través del Camino de los Mártires con la calle Traductores. Para dar continuidad al proyecto de carril bici que rodee toda la ciudad en paralelo a la Ronda, se ha incluido el tramo correspondiente a la zona donde nos encontramos, y se completa la urbanización con un carril bici en paralelo al vial ejecutado. Desde el punto de vista ornamental y medioambiental, además del vial señalado, la urbanización que se ejecutada integra una zona verde completamente ajardinada entre las instalaciones municipales y la Ronda. En este espacio se ha ejecutado la plantación de 14.400 m2 de césped y 44 árboles de sombra de hoja caducifolia.

La creación de un vial nuevo en una zona donde no existe red de saneamiento ha sido un reto al que se ha enfrentado este proyecto. Con el fin de no aumentar innecesariamente los caudales de aguas pluviales en la cabecera de la red de la ciudad, se ha optado por el sistema de infiltración al freático, de manera que se pretende que los 17.500 metros cuadrados que se urbanizan no viertan al saneamiento municipal. Se ha proyectado para ello la construcción de un tanque de acumulación-infiltración por el que se pretende incorporar a las aguas freáticas las procedentes de aguas pluviales.