El nuevo sistema de alquiler público de bicicletas de Valladolid ha llegado a la ciudad sorprendiendo a los usuarios por sus servicios así como la calidad de los vehículos. El pasado jueves 1 de febrero, se estrenó de manera oficial las bicicletas BIKI de doble modalidad, eléctricas y mecánicas, y que ya en sus primeros seis días han alcanzado más de 2.000 abonados. El alcalde Óscar Puente ha celebrado este gran acogida por parte de los vallisoletanos del nuevo sistema público de bicicletas ya que el anterior contrato con Vallabici tardó 6 años en llegar a esa misa cifra, «los datos son aplastantes».
Precisamente, el Ayuntamiento de Valladolid ha lanzado para este primer mes de funcionamiento unas tarifas de enganche con un 50% de descuento para los bonos de los usuarios. Valladolid ha desplegado 97 estaciones a lo largo de la ciudad con casi un millar de unidades de bicicletas de color naranja para las convencionales y azul para las eléctricas que están consiguiendo altas demandas por parte de los vallisoletanos.
A pesar del alto grado de satisfacción que reflejan las cifras de los nuevos vehículos de movilidad sostenible de la ciudad del Pisuerga, BIKI ha sido uno de los temas a debate en el Pleno municipal celebrado este martes en el Consistorio vallisoletano. El concejal de Movilidad, Luis Vélez, se ha defendido de las acusaciones por parte de Vox que planteaba recuperar las 250 placas de aparcamiento suprimidas por la instalación de las estaciones de BIKI.
El concejal de Vox, Javier García Bartolomé, aseguró que existen «espacios de sobra» en las aceras, plazas y parques de la ciudad para situar las estaciones que de manera «arbitraria y a posta» ha instalado el Ayuntamiento eliminando, dice, plazas de aparcamiento que la gente utiliza, al tiempo que ha señalado que los ciudadanos no utilizan estas bicicletas porque, a su juicio, «están ancladas en los puntos».
El alcalde de Valladolid no dudó en responder a este ataque por parte del concejal de Vox y defendió que el 90% de los casos las ubicaciones alternativas que plantean desde la formación de Abascal suponen incumplir la Ley de Accesibilidad. «Me sorprende mucho que diga usted que no ve ciclistas usando el sistema de bicis de alquiler en las calles, a lo mejor le vamos a tener que poner a usted el latido de los ciclistas para que sea consciente de que existen», bromeaba Puente. Por su parte, el concejal de Movilidad, Luis Vélez, explicó que la reordenación para implantar BIKI propicia que el espacio ocupado por 200 usuarios de vehículos contaminantes favorecerá ahora a 320 ciclistas que «pronto serán el doble».
