El campo de Castilla y León reclama ayudas por valor de 1.000 millones para paliar los daños de la «catastrófica» sequía durante este año

Miles de agricultores y ganaderos han salido a la calle este jueves en Valladolid en forma de protesta para «clamar» ayudas directas que permitan paliar los daños ocasionados por la «catastrófica» sequía de este año, que ha sido sin duda, «la mayor de los últimos 40 años». Los afectados cuantifican las pérdidas en el campo por este fenómeno en unos 2.000 millones de euros, por lo que alzan su voz para reclamar ya unas ayudas al sector, y exigen a las administraciones al menos la mitad en ayudas.

Las organizaciones de Asaja, la Alianza UPA-COAG y UCCL han convocado en Castilla y León manifestaciones al unísono bajo el lema ‘La sequía arruina al campo. Ayudas directas y PAC flexible ya’, y en las que los manifestantes han reclamado medidas «urgentes» para afrontar la sementera en 2024, ya que consideran que el sector «está en la UVI» en estos momentos. Los agricultores y ganaderos de la provincia de Valladolid han advertido también este jueves de que si no se pone solución de forma inmediata podría suponer la «desaparición de muchísimas explotaciones».

Asimismo, los manifestantes han querido dar con esta protesta el «primer toque de atención» a las administraciones y ya amenazan que si no ven soluciones «rápidas» se verán obligados a salir de nuevo a las calles. Este jueves en Valladolid, la multitudinaria manifestación ha comenzado a las 12.00 horas en la Delegación del Gobierno en Castilla y León, y ha continuado por las calles Francisco Scrimieri, Arzobispo José Delicado, Avenida Miguel Ángel Blanco, puente de Isabel la Católica hasta el Paseo de Isabel la Católica para, de nuevo, cruzar el río Pisuerga por el puente del Poniente para llegar a la sede de la Consejería de Agricultura, en la calle Rigoberto Cortejoso, por la Avenida Gloria Fuertes y calle Pío del Río Hortega.

El campo de Castilla y León pretende ser claro y por ellos los manifestantes reclaman en primer lugar al presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, que declare la situación de sequía en la Comunidad, como ocurrió en 2017, ya que de lo contrario, muchas de las ayudas no tendrán «cobertura legal». A raíz de la protesta, los agricultores han pedido «ayudas directas y financieras» y una «flexibilidad de la PAC», puesto que a su juicio, se trata de una «barbaridad agronómica», al tener que dejar hasta el 1 de septiembre parcelas llenas de malas hierbas.

Por último, las organizaciones agrarias han insistido a las administración nacional y autonómica una serie de ayudas por valor de 1.000 millones para que los productores de Castilla y León se hagan cargo de los otros 1.000 millones. «Pedimos a las administraciones la misma rapidez para aplicar medidas contra la sequía que para sacar otras medidas burocráticas que ahogan el campo», ha exigido el presidente de Asaja Castilla y León, Donaciano Dujo.