El Atlético Valladolid se afianza en la cuarta posición tras imponerse a Anaitasuna

El Balonmano Atlético Valladolid sigue con su buena dinámica en Huerta del Rey, donde sólo el Barça ha sido capaz de puntuar esta temporada, y suma su séptima victoria del campeonato en un choque ajustado, que pareció decantarse del lado local en los últimos instantes pero que se complicó hasta el punto de hacer peligrar el triunfo. Con 34-30 en el marcador y poco más de tres minutos por jugarse, una exclusión local y tres goles visitantes a puerta vacía llevaron la incertidumbre a Huerta del Rey, que terminó celebrando por todo lo alto la victoria.

Con un ritmo trepidante en el juego desde el primer instante, el Atlético Valladolid fue capaz de tomar distancias en el marcador en los compases iniciales del choque, gracias a la dirección y acierto en el lanzamiento de Alfonso Lima y a un sólido 6:0 defensivo. De este modo, apenas se habían disputado seis minutos de juego cuando el equipo local lograba una renta de tres tantos a favor. Los vallisoletanos mantuvieron esa diferencia durante buena parte de la primera mitad, aunque sin terminar de romper el choque pese a disfrutar de varios ataques que le habrían permitido ampliar la ventaja, tanto por las propias imprecisiones como por un incremento de la agresividad defensiva navarra.

Helvetia Anaitasuna demostró su carácter y poco a poco fue reduciendo la diferencia hasta llegar a ponerse por delante en el marcador con el 15-16 al minuto 28, gracias también al acierto en las acciones de contraataque de Martín Ganuza, que llegaría al descanso con ocho goles en su cuenta y un 100% de efectividad. Así, y después de llevar la delantera durante casi toda la primera mitad, los gladiadores azules alcanzarían el intermedio con 17-19 en el marcador y la necesidad de remontar en la segunda parte. El atasco local se prolongaría en el inicio de la segunda mitad y David Pisonero se vio obligado a pedir tiempo muerto cuando apenas se habían disputado cuatro minutos de juego, al ver que Helvetia Anaitasuna se marchaba en el marcador con cuatro goles de ventaja apoyado en su ataque de 7 contra 6.

El Balonmano Atlético Valladolid encontró la forma de frenar la sangría, tanto por el acierto de César Pérez en la portería como por los robos defensivos, que permitieron sendos goles a puerta vacía que llevaron a la remontada, gracias a un parcial de 4-0 que completó Miguel Camino anotando el tanto del empate. La mejor manera de celebrar su partido 200 en Asobal con el conjunto vallisoletano. La apuesta por el 5:1 defensivo y la responsabilidad en el lanzamiento exterior de los laterales brasileños Freitas y Toledo ayudaron a que el Atlético Valladolid lograra un parcial de 4-0 en el tramo final del choque que hizo pasar el choque de 28-28 a 32-28, con sólo 6 minutos para el final del encuentro.

Entonces, y cuando parecía que el choque caería del lado local sin grandes agobios, una exclusión de los vallisoletanos y tres pérdidas consecutivas permitieron que los navarros lograran goles a puerta vacía que condujeron a un final de infarto. Una última parada de César Pérez cerró el choque y los dos puntos, y la cuarta posición de la clasificación, se quedaron en Huerta del Rey con el resultado final de 34-33.