El Real Valladolid y el Espanyol dirimen este domingo en Zorrilla a partir de las 14.00 horas un duelo de los que pueden marcar la trayectoria en la competición. Los dos equipos, actualmente rivales directos en la pelea por la permanencia, son conscientes de la trascendencia del duelo y de lo importante que sería sumar tres puntos.
El Pucela llega al duelo herido tras su mala actuación en Balaídos, con muchas ganas de demostrar que lo acaecido en Vigo fue un paréntesis en su buena marcha de los últimos tiempos. Ante un rival que firma buenos números como visitante, los de Pacheta necesitan el efecto Zorrilla para sumar de tres en tres en una carrera por la permanencia que se prevé cara, intensa y frenética. Por su parte, el Espanyol ha cogido aire tras dos victorias consecutivas y cuenta con la pareja Joselu y Braithwaite como una de las mejores del campeonato.
Históricamente los números favorecen a un conjunto blanquivioleta que quiere volver a mostrar su mejor versión para que el partido ante el Celta se quede en un tropiezo, tal y como espera el vestuario. Pacheta, que reconoció que ha redoblado esfuerzos para tratar de mejorar la producción ofensiva del equipo, se mostró convencido de que el equipo firmará un buen encuentro y olvidará el “accidente” de Vigo.
El míster no podrá contar con los lesionados Masip, Kenedy y Anuar, tampoco con los sancionados Amallah y Kike Pérez. Las miradas estarán puestas en Darwin Machis, entre algodones las últimas dos semanas a causa de unas molestias en el sóleo.
El encuentro será dirigido por el colegiado castellano-manchego Pizarro Gómez, auxiliado en el VOR por Gil Manzano, y servirá para presentar en sociedad los tres equipos femeninos de la cantera blanquivioleta. Una manera de demostrar el compromiso blanquivioleta en el arranque de la semana conmemorativa del Día Internacional de la Mujer, cuya guinda será la disputa del primer partido de fútbol femenino en Zorrilla.
