Olmedo volvió un año más a disfrutar de las artes circenses en su máximo esplendor con el colorido CircOlmedo que ha llenado durante este fin de semana a la localidad vallisoletana de atractivos espectáculos. La Villa del Caballero ha disfrutado como nunca de la magia e ilusión que desprende esta cita ya tan querida por sus vecinos y que acapara el interés de miles de vallisoletanos que buscan empaparse de la mejor cultura y arte en el mundo rural. La XIV Muestra de Artes Circenses CircOlmedo se clausuró este domingo 21 de mayo con una jornada repleta de actuaciones en horario matutito y vespertino con alrededor de 6.000 espectadores durante las cuatro jornadas del festival.
Esta última jornada ha estado marcada por espectáculos de altura de la mano de la compañía Nostraxladamus que pusieron a todos los asistentes con el corazón en un puño por sus espectaculares saltos y equilibrios ‘Al Aire’. Precisamente, este show, que tuvo que cancelar su actuación del sábado por la lluvia, es un cabaret circense concebido y creado para CircOlmedo que pone en valor el funambulismo y acrobacia tradicional del puro circo. Una gran plataforma en forma de barco con 14 metros de longitud y 10 metros de altura simulan que son marineros a la deriva.
Entre las técnicas que utilizó esta compañía se encuentran, por ejemplo, el funambulismo a 7 metros de altura, mástil chino, trapecio, equilibrismo, malabares y clown. El Recinto Ferial acogió uno de los espectáculos más llamativos de esta presente edición y cientos fueron los asistentes que se acercaron al lugar para presenciar el más difícil todavía sobrevolando Olmedo. La valentía de los tres artistas subidos en su trapecio se mezclaba con la melodía de instrumentos en directo con los sonoros aplausos del público que se entregó en vivo y en directo al gran número.
La destreza sobre el trapecio y el equilibrio sobre las cuerdas mantuvo en vilo al público olmedano con cada paso que los protagonistas daban en lo más alto. Además, la fuerza sobre el mástil chino dejó momentos para el asombro con un cuidado y bello contorsionismo aéreo. Precisamente, el número que presentó la compañía Nostraxladamus es una muestra de circo tradicional con técnicas contemporáneas que hacen que el público se deje llevar y viva un sueño difícil de alcanzar para muchos, como son esos impresionantes equilibrios, que requieren de una gran concentración para no perder pie y producirse caídas desde una considerable altura.
El Ayuntamiento de Olmedo a través de la dirección de CircOlmedo buscan en cada edición superar la anterior, no solo en el número de espectadores sino en las novedades y calidad espectáculos que invaden durante cuatro días la Villa del Caballero. La localidad se viste para la ocasión con decorados circenses elaborados por los propios vecinos y jóvenes para ambientar las calles y plazas y así devolvernos a aquellos tiempos en los que el circo llegaba a nuestra ciudad con toda su comitiva con una llamada de asistencia a su tremenda carpa. El mundo circense ha evolucionado considerablemente en los últimos años y el nuevo circo se abre paso con una combinación entre lo puramente tradicional con lo más innovador en clave de humor.
Más de 50 artistas procedentes de Cataluña, Madrid, Castilla y León, País Vasco, Valencia, Aragón, Andalucía han pasado por Olmedo, y por supuesto, compañías y artistas de Valladolid también han tenido un peso muy importante en la edición de este año. La directora de CircOlmedo, Montserrat Sánchez, asegura en una entrevista en Valladolid Plural que en «Olmedo queremos mantener vivo el circo y nos gusta ver como todo el mundo se contagia con esta magia y pueda tener la oportunidad de ver grandes espectáculos». Además, de la decoración de sus calles y rincones como el Recinto Ferial, los Patios de San Pedro o la emblemática Corrala del Palacio del Caballero que este año ha contado además con una enorme carpa roja y blanca para ambientar aún más la cita y ofrecer nuevos espectáculos en su interior.
«CircOlmedo supone volver a vivir en las calles, disfrutar del circo y tiene una gran repercusión tanto en la provincia como en la Comunidad, convirtiéndose en la villa del circo», señalan desde la dirección del festival al tiempo que aseguran que los espectáculos de CircOlmedo han atraído a niños y familias en las actuaciones de día y noche como la gran gala del sábado que reunió a decenas de jóvenes y adultos que se sentaron en las butacas para volver a su niñez y disfrutar de las carcajadas bajo una atmósfera brillante. Los más pequeños también pudieron aprender y conocer el mundo circense a través de atrevidos talleres de manualidades, pintacaras, juegos y animación.
La mañana del domingo finalizó con un show humorístico, muy propio del teatro de calle, para hacer llegar el circo a las familias. La Corrala del Palacio del Caballero acogió el número de Javier Ariza y su conocido ‘Carman’, una comedia callejera protagonizada por un excéntrico showman y un seat 600. Una divertida actuación en la que un coche icónico de nuestro país cobra vida para terminar la función moviéndose por si mismo sin conductor en una rutina musical y circense. Los malabares, clown, equilibrio y baile hicieron las delicias de los pequeños y mayores que no podían aguantar la risa con los chascarrillos del humorista mientras grababan con sus teléfonos móviles los mejores momentos para tenerlos para siempre de recuerdo.
Números en altura, aire, malabares, equilibrio, diábolos, pasacalles, música y sobre todo, mucho humor se han podido disfrutar desde el pasado jueves 18 hasta este domingo 21 de mayo en la XIV Muestra de Artes Circenses de Olmedo que un año más ha vuelto a lucir el más difícil todavía y el número más arriesgado jamás visto. Son ya catorce ediciones, pero la magia y la ilusión por alcanzar el mejor show se mantiene aún en la localidad vallisoletana que ya piensa en el próximo año para atraer nuevos intérpretes y espectáculos que acerquen el circo tradicional y contemporáneo al medio rural.
