La localidad vallisoletana de Íscar está hoy de celebración con el cumpleaños de su vecina más longeva. La iscariense Teodora Aceves Cabrero cumple este sábado 6 de mayo ni más ni menos que 103 años, convirtiéndose en la vecina centenaria del municipio. La mujer nació en Íscar el 6 de Mayo de 1920 y ha vivido toda su vida en la localidad con un taller de costura.
El municipio vallisoletano no ha dudado en felicitar en un emotivo acto a Teodora, donde el alcalde José Andrés Sanz, le ha hecho entrega de un detalle en la Residencia Santa María de los Mártires de Íscar, lugar en el que actualmente reside y donde la mujer centenaria ha podido disfrutar de una fiesta con familiares, amigos y una misa oficiada por el párroco Juan Carlos Plaza.
Teodora Aveces es una vecina más que conocida en Íscar, hija de Úrsula Cabrero y David Acebes, y fue la segunda de cuatro hermanos Paulino, Timoteo, Micaela y Bernabé. Sus padres regentaban una carnicería, tenían ganado y tierras de labranza. Teodora fue a la escuela hasta los 14 años y aprendió a coser, lo que le permitió después crear un taller de costura y además enseñar a otras jóvenes. Se casó con el iscariense Eustaquio de la Fuente a los 25 años, y tuvieron cuatro hijos Pío, José María, Almudena y María Pilar. Para la nueva familia y su economía también adquirieron animales como vacas de leche, chotos y marranos de cría y años después abrieron una tienda de ultramarinos.
La iscariense centenaria resume su vida con una infancia plena y una familia maravillosa. «Nunca me faltó de nada. Tenía muchas amigas, jugábamos al escondite, al corro de las patatas, a la comba, los alfileres, me divertía mucho jugando con ellas. Después trabajamos mucho, mucho, pero nos fue bien. Fuimos muy felices», cuenta Teodoro en su día grande.
