Un robot castellano y leonés envía sus exploraciones de infraestructuras eléctricas en tiempo real a cualquier parte del mundo

Iberdrola y Arbórea Intellbird han puesto en marcha un nuevo robot, el robot castellano y leonés ‘Antecursor I’, capaz de enviar sus exploraciones en tiempo real a cualquier parte del mundo gracias a la red 5G. Este robot se trata de un revolucionario sistema de inspección que mejora la eficiencia al lograr un mantenimiento predictivo automático y digital de las infraestructuras eléctricas, aplicado de manera novedosa sobre las subestaciones transformadoras ofreciendo mayor trazabilidad y seguridad de los trabajadores.

Este androide basa su movimiento automático a través de las instalaciones eléctricas en un singular proceso patentado por la tecnológica salmantina inspirado en las estrategias de caza de la gineta, el vivérrido nocturno que puebla nuestros encinares, capaz de desplazarse con precisión en la oscuridad.El robot capta datos de manera automática de todas las estructuras críticas de la subestación, gracias a sensores de alta resolución de imagen visible y termográfica, y en tiempo real los envía mediante la red 5G de Orange a la “torre de control virtual”, ubicada en las instalaciones de Arbórea en el Parque Científico de la Universidad de Salamanca.

Una vez allí, estos datos son procesados para construir un gemelo digital y detectar, medir y cuantificar anomalías gracias a las plataformas de software de la salmantina. Adicionalmente, los datos son remitidos, también en tiempo real, a varios centros de decisión de Iberdrola. La red 5G permite, además, en caso de necesidad, tomar el control manual del robot -que hace su recorrido de manera autónoma- en directo.

El monitorizado autónomo de una subestación permite detectar fallos incipientes de forma más rápida y eficiente, lo que supone una ventaja también en caso de que surja una emergencia que requiera monitorización inmediata. De esta manera, la tecnología permite evaluar los daños sin necesidad de desplazarse sobre el terreno, lo que redunda en una mayor eficiencia y una reducción muy notable de costes y emisiones de CO2.

Este nuevo proceso ha sido el resultado de combinar la experiencia de Iberdrola en la operación y mantenimiento de la red de distribución eléctrica, con los procedimientos y herramientas de inspección digital de la empresa salmantina Arbórea.