Un Pleno Extraordinario de alto voltaje y con informe en mano para debatir sobre soterramiento o integración en Valladolid

El alcalde de Valladolid, Jesús Julio Carnero, ha anunciado el próximo lunes 11 de marzo a las 09.00 horas se celebrará el Pleno Extraordinario solicitado por el PSOE para debatir sobre la integración ferroviaria o la disolución de la Sociedad Valladolid Alta Velocidad. Los socialistas realizaron la petición de este Pleno Extraordinario, precisamente, para poner sobre la mesa del Ayuntamiento las opciones que planteó el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, el pasado 23 de febrero, aunque Carnero ya expresó ese mismo día que no quiere ninguna de las dos cosas y mantiene su firme convicción por el soterramiento.

Asimismo, en la jornada de este martes, el regidor vallisoletano también ha informado que ha recibido el informe de Adif sobre el estudio del soterramiento, aunque «no con toda la documentación solicitada». Jesús Julio Carnero ha indicado que en el próximo lunes tendrá lugar el Pleno Extraordinario, en el que desde el equipo de Gobierno «vamos a poner de manifiesto que Valladolid necesita y merece tener soterrada la vía del tren y esto es una cuestión de voluntad política, y si la hay, se acometerá el soterramiento como se está acometiendo en otras ciudades». Mientras que desde el Grupo Socialista ya señalaron días atrás que se trata de una sesión, con carácter extraordinario, para que el alcalde de Valladolid tome una decisión ante las «únicas dos opciones viables, integración o disolución«, planteadas previamente por Óscar Puente.

Por otro lado, el alcalde ha informado esta misma mañana que ya ha recibido el informe de Adif, que tanto había solicitado al ministro de Transportes tras la presentación del PowerPoint del estudio de soterramiento, y aunque todavía no lo ha podido analizar en profundidad, sí ha subrayado que la documentación «alude a un incremento de las frecuencias en la ciudad de Valladolid importantísima como paso hacia toda la zona noroccidental de nuestro país». «Precisamente, ese incremento de frecuencias hace que necesariamente la vía del tren tenga que estar soterrada porque la alternativa es convertir a Valladolid en una ciudad insufrible desde el punto de vista del paso de muchísimos más trenes que están pasando a día de hoy a lo largo y ancho de la ciudad en superficie«, ha manifestado Carnero.

«Adif es una administración a la que no le gusten los soterramientos, si hubiera sido por ellos no habrían soterrado ninguna vía del tren en todo el país, pero es que los intereses de los ingenieros de Adif son unos intereses lógicos, comprensibles desde el punto de vista de su óptica pero la convivencia en una ciudad entraña no solo el interés ferroviario sino que es un interés muchísimo más amplio y grande«, ha destacado el regidor. En esta línea, Carnero ha señalado que «nosotros tenemos la obligación de reivindicar lo que supone ganar desde un punto de vista medioambiental, económico, de progreso, y sobre todo, social». El alcalde ha añadido que analizarán el estudio del Gobierno de España, aunque ha insistido en que «seguiremos avanzando en la que es nuestra pretensión, que es conseguir que se modifique el convenio de 2017 para proceder a partir de ahí a iniciar el proceso de integración a través del soterramiento de la vía del tren y no de una mala integración que es lo que actualmente se mantiene en la ciudad».

Asimismo, el primer edil también ha señalado que pedirán a Adif «toda la documentación que pensamos que requiere el poder estudiar en profundidad esta cuestión». Por último, el regidor vallisoletano ha reflexionado sobre si Valladolid como «zona de paso» en el tráfico ferroviario «no tiene derecho al soterramiento y por ser zona de paso se les tiene que imponer una mal llamada integración en superficie». «La mayor intensidad del tráfico ferroviario viene dado porque Valladolid es una zona de paso. Aquí solo tienen derecho a tener soterramiento aquellos que tiene una especie de ‘estación términi’ como son otras ciudades españolas, mientras que a las de paso no se las puede dar una solución. Técnicamente el soterramiento es posible, es una operación compleja como otras tantas en nuestra vida, pero lo complejo no significa que sea inviable«, ha concluido.