Los champiñones son unos de los manjares de nuestra gastronomía que son muy recurridos para hacer entrantes o aperitivos. Además son muy flexibles a la hora de combinar sabores y hemos encontrado un plato clave, rico y fácil. Se trata de los champiñones rellenos de jamón y queso al horno, un clásico que no fallará en tus próximas comidas familiares durante esta primavera. Son un bocado delicioso que gusta tanto a pequeños como mayores. Esta receta es una idea ya que el relleno de los champiñones se puede hacer totalmente al gusto, con gambas, verduras o carne. A continuación te contamos los pasos para elaborar esta deliciosa receta que seguro que harás próximamente.
Esta receta es para cocinar una ración para cuatro personas y lo primero que tienes que tener en cuenta son los ingredientes. En primer lugar, necesitarás 16 champiñones medios de la variedad que más te guste, aunque recomendamos portobello, una cebolla media, 100 gramos de jamón serrano, 400 mililitros de salsa de tomate, 100 mililitros de vino blanco, 150 gramos de queso mozzarella o especial de gratinar, orégano, aceite de oliva virgen extra y sal. Lo primero que tenemos que hacer es preparar los champiñones antes de elaborar su relleno. Empezamos limpiando los champiñones y retiramos la base o tronco del champiñón con un cuchillo. Una vez limpios, cortamos los champiñones al gusto. Reservamos los troncos de los champiñones para meter luego con en el relleno del jamón y cebolla.
Seguidamente, pelamos la cebolla y la picamos muy fina. Limpiamos muy bien los restos de suciedad de los troncos del champiñón y cortamos, y hacemos tiras o taquitos pequeños con el jamón serrano. Ahora, cogemos una sartén con un chorro de aceite de oliva virgen extra y lo calentamos a fuego medio. Añadimos la cebolla y los troncos del champiñón con un poco de sal y la cocinamos hasta que comience a dorarse, cuando lleven 2 minutos vertemos el vino blanco y dejamos unos 10 minutos aproximadamente hasta que evapore todo el alcohol. Después añadimos el jamón, lo salteamos todo durante 2 minutos y lo retiramos del fuego. Antes del siguiente paso, acuérdate de poner a precalentar el horno a 180 grados. Acto seguido, cogemos una sartén limpia para sellar los champiñones durante 3 minutos por cada lado, de modo que no se pochen pero queden sellados y dorados.
Mientras tanto echamos el sofrito en un bol con salsa de tomate y orégano, mezclando bien todos los ingredientes. Rellenamos los champiñones con ayuda de una cucharita y vamos rellenando con el sofrito hasta que rebose. Los colocamos sobre una bandeja o una sartén apta para horno. Echamos por encima del sofrito el queso para fundir y los metemos en la bandeja en el horno a media altura, horneando con calor arriba y abajo durante 15 o 20 minutos, hasta que el queso se haya fundido y los champiñones cojan un color oscuro. Los sacamos del horno, los ponemos en platos y listos para servir. Ahora simplemente a degustar con un rico vino, agua o cerveza.