Los Servicios de Emergencias de Valladolid simulan accidentes de tráfico para potenciar la coordinación entre equipos

El consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Carlos Suárez-Quiñones junto con el presidente de la Diputación de Valladolid, Conrado Íscar, la delegada territorial, Raquel Alonso, el alcalde de Tordesillas, Miguel Ángel Oliveira, ha asistido esta mañana en el parque de bomberos de Tordesillas a un simulacro de intervención de los servicios de emergencia en un accidente de tráfico, incluido en la formación de un curso organizado por la Junta. Durante tres días, los 32 alumnos, entre bomberos, sanitarios de emergencias, policías y voluntarios de Protección Civil, trabajan técnicas de intervención básicas y avanzadas con una asistencia sanitaria adecuada a cada tipo de accidente. El II Plan de Formación de la Agencia de Protección Civil y Emergencias es una prioridad de la Consejería para 2023.

El curso tiene una duración de 21 horas y en él están inscritos 32 alumnos procedentes de varios colectivos, bomberos de la Diputación de Valladolid, policías locales de Simancas, La Cistérniga, Medina del Campo y Tordesillas, voluntarios de Protección Civil de Aldeamayor de San Martín, Arroyo de la Encomienda, Medina del Campo, Valladolid, Tordesillas y Tudela de Duero, y sanitarios del Sistema Sanitario de Emergencias de Castilla y León. El objetivo es la coordinación entre los diferentes servicios de emergencias que van a intervenir en un accidente de tráfico, optimizando la seguridad en la intervención, integrando técnicas de intervención básicas y avanzadas con una asistencia sanitaria adecuada a cada tipo de accidente. Para ello, se realiza un conocimiento de todas las competencias que debe desarrollar cada equipo de emergencias –bomberos, sanitarios, policías locales y voluntarios de Protección Civil– para que exista una buena coordinación en accidentes de tráfico.

En el curso se van a distribuir 40 equipos de inmovilización pediátrico y extracción, que se van a ceder a los servicios de prevención, extinción de incendios y salvamento de Castilla y León, la primera comunidad autónoma que trabaja con estos dispositivos. Los contenidos del curso incluyen aspectos relacionados con la ubicación del personal y los equipos cuando se produce el accidente de tráfico, la señalización, estabilización de vehículos, extinción del fuego en caso de incendio, tipos de accidentes, apoyo a la asistencia sanitaria de emergencias y técnicas de intervención multidisciplinar según el tipo de accidente de tráfico.

Esta mañana, junto al Parque de Bomberos de Tordesillas, se ha realizado un simulacro de accidente de tráfico múltiple, donde han intervenido todos los Servicios de Emergencia como bomberos, sanitarios de emergencia, policías y voluntarios de Protección Civil. Se han recreado dos zonificaciones, donde han trabajado simultáneamente sobre una víctima atrapada en cada área de trabajo, asumiendo cada servicio sus respectivas competencias. Los alumnos han desarrollado la cadena de supervivencia, donde la policía ha sido la primera en llegar y la que señalizó inicialmente una zona segura de trabajo, adaptando el escenario para los siguientes equipos intervinientes.

Posteriormente han llegado los bomberos y los equipos sanitarios de emergencia, que han realizado las técnicas de intervención con seguridad y coordinación, con el objetivo de asegurar un rescate adecuado de la víctima atendiendo sus lesiones y tipo de accidente. Finalmente, los miembros de Protección Civil se han incorporado al siniestro para hacer un apoyo logístico si fuera necesario y en apoyo siempre de los equipos intervinientes.

El consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, de cuyo departamento depende la Agencia de Protección Civil y Emergencias, ha destacado que en 2023 se aprobará el II Plan de formación de la Agencia, que incluirá formación práctica altamente especializada en intervenciones extremas, en las que podrán participar todos los servicios involucrados en caso de una emergencia. La Junta ha llevado a cabo en los últimos cinco años un total de 610 actividades formativas para 11.200 personas formadas de los colectivos de bomberos, policías locales y voluntarios de Protección Civil, con una inversión de 2’47 millones de euros.