Este próximo martes 12 de abril a las 19.30 horas tendrá lugar en los cines Casablanca de Valladolid el preestreno de la película U-topos: ‘La utopía guaraní-jesuítica’, con la presencia de su director, Vicente Pérez Herrero.
«Ni el Papa ni el Emperador es el dueño del mundo» fórmula Francisco de Vitoria y con ello desautoriza cualquier guerra por motivos religiosos y, va más lejos aún, cualquier intento forzado de imponer la religión. Estas lecciones fueron muy importantes para la formulación de las Nuevas Leyes de Indias y supuso cambios económicos pues prohibieron el trabajo forzado de los pueblos originarios que tantos abusos y muertes había originado. Fue en el arma legislativa con la que los jesuitas expulsaron a los colonos explotadores y fundaron las misiones utópicas. Un documental producido por Tiempos difíciles con la participación de TVE, APUNT, IVAC Generalitat Valenciana y CREA SGR.
El humanismo renacentista de los siglos XV-XVI y el debate de los Derechos de los Indios en Salamanca, propician la creación de comunidades Utópicas entre Guaraníes y Jesuitas. América era para los utópicos la tierra virgen donde se podría construir una sociedad perfecta que era imposible en la Europa convulsa por las guerras de religiones y los poderes terrenales. 150 años después, el esplendor económico y cultural de estas misiones chocan con el poder absolutista de Carlos III que considera que los jesuitas han creado un estado paralelo y ordena su expulsión con la consiguiente pedida de la que fue la más importante experiencia de convivencia intercultural. Los guaraníes vuelven a la selva ante la negativa los jesuitas de rebelarse contra la corona y negarles apoyo.
Las comunidades son destruidas por los nuevos colonos administradores y la floreciente economía local entra en quiebra. El documental se desarrolla en dos niveles: la historia de cómo se formaron las misiones hace 400 años y en un paralelo, la encrucijada indigenista actual que ve sus tierras y bosques deforestados para el cultivo extensivo de la soja, expulsando los pueblos originarios y condenándolos a la marginación y pobreza. Con la intervención de Bartomeu Melia, jesuita antropólogo y máxima autoridad en el tema. Defensor de las comunidades guaraníes, fue expulsado del Paraguay durante la dictadura de Stroessner.
