Las cartas bomba contra la embajada de Ucrania y Pedro Sánchez se enviaron desde Valladolid

La Policía Nacional ha localizado en Valladolid el envío de las cartas bomba que se han recibido en los últimos días en las embajadas de Ucrania y Estados Unidos en Madrid, así como al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez y a la ministra de Defensa, Margarita Robles, entre otros. Un origen que ha pillado por sorpresa a los investigadores, aunque por el momento, no se ha determinado si el responsable del envío de estas cartas incendiadas reside en Valladolid.

La investigación apunta que estas seis cartas se enviaron desde distintos buzones ordinarios de Valladolid en zonas que carecen de cámaras de seguridad. En este sentido, las pesquisas avanzan que la persona responsable que puede estar detrás de estos envíos no cuenta con una logística sofisticada ni tampoco con una estructura lo suficientemente compleja como para despistar a los agentes de seguridad de toda España.

Tampoco se descarta que el autor de estos paquetes bomba se desplazara, sencillamente, a Valladolid para enviar las cartas desde los buzones. La Audiencia Nacional mantiene que la autoría de todos los paquetes bomba parece corresponder a un mismo origen ya que todos se enviaron desde territorio español, concretamente desde la capital vallisoletana.

Según fuentes consultadas por este periódico, la investigación se está llevando a cabo por la Comisaria General de Información de Madrid. Por el momento, la Delegación del Gobierno en Castilla y León y la Subdelegación del Gobierno en Valladolid no tienen información sobre este asunto y esta noticia la han recibido a través de los medios de comunicación.

Los paquetes explosivos fueron enviados desde Valladolid destino Madrid, excepto uno que fue dirigido a Zaragoza, concretamente a una empresa armamentística que fabricó lanzacohetes que se enviaron a Ucrania ante el conflicto bélico con Rusia. Además, durante estos días, las embajadas de Ucrania en Europa, incluida la de Madrid, han recibido paquetes con ojos de animales ensangrentados, aunque se descarta que tengan la misma relación, puesto que estos paquetes procedían del extranjero.