La provincia de Valladolid, territorio de fortalezas: Castillo de Fuensaldaña

En la provincia de Valladolid puedes viajar al pasado a través de sus castillos y fortalezas con un patrimonio único en todo el territorio. A la hora de hablar de los castillos vallisoletanos, se nos viene a la mente tres emblemáticos espacios como son el Castillo de La Mota de Medina del Campo, el de Peñafiel o el de Fuensaldaña. Precisamente, este último, es el protagonista de la tercera entrega dedicada a descubrir el viaje en el tiempo de las fortalezas más excelentes de nuestra provincia. El Castillo de Fuensaldaña tiene su origen en el Siglo XIII pero no es hasta el Siglo XV cuando adquiere su actual aspecto.

Esta fortaleza fue durante un tiempo la residencia señorial de Los Vivero cuando Don Alonso Pérez de Vivero, contador mayor de Juan II de Castilla, quien como era habitual en la época adquirió los lotes señoriales que en este caso conformaban Fuensaldaña para construirse un castillo-palacio que no llegó a terminar puesto que fue asesinado por conjurar contra Álvaro de Luna. Las obras continuaron años más tarde gracias al hijo de Don Alonso, Juan de Vivero. Posteriormente, el castillo fue arrebatado a Los Vivero por los Reyes Católicos por su apoyo a la Reina Juana y no volvería a ser de su propiedad hasta 1490.

El castillo pertenece a la época de la Escuela de Valladolid por su estilo arquitectónico de planta cuadrada con torres circulares en las esquinas y en uno de sus lienzos, una gran torre del homenaje rectangular en la que aparece un patio de armas perteneciente a Los Vivero. La torre tiene una altura de 34 metros y se unen los pisos interiores con un sótano a través de una escalera de caracol. Además, cabe recordar que en el año 1521, la fortaleza de Fuensaldaña fue tomada por las tropas comuneras y convertido en uno de los bastiones defensivos.

El de Fuensaldaña es uno de los castillos bajo medievales de Castilla que mejor representan el gran poder de una familia de esa época. En 1983, el castillo fue restaurado por la Diputación Provincial de Valladolid para convertirlo en un parador turístico, aunque no se llevó a cabo finalmente puesto que se cedió la propiedad a la Junta de Castilla y León para convertirlo en la sede de las Cortes autonómicas desde ese mismo año hasta junio de 2007. Actualmente, este emblemático espacio de la provincia vallisoletana está albergado como un centro turístico de interpretación de los castillos y a lo largo del año se realizan numerosas actividades culturales, vitivinícolas, visitas teatralizadas o incluso conciertos.

Todo aquel que quiera descubrir la historia del Castillo de Fuensaldaña así como sentir de primera mano el pasado medievo lo puede hacer a través de visitas guiadas por el interior de la fortaleza. El horario de cara a este verano hasta el 30 de septiembre es de martes a domingos y festivos de 10.30 a 14.00 horas y de 16.30 a 20.00 horas. Durante el invierno, el horario de apertura es de jueves a domingos y festivos de 10.30 a 14.00 horas y de 16.00 a 18.00 horas.