La muerte del joven trabajador de Cortes Metalúrgicos Oviedo vuelve a señalar la siniestralidad laboral en Castilla y León

La muerte del trabajador de 38 años en la empresa vallisoletana Cortes Metalúrgicos Oviedo en la noche del jueves 24 de marzo vuelve a poner en el foco la inseguridad y la siniestralidad que sufren los empleados en muchas empresas de Castilla y León. En este sentido, Comisiones Obreras lamenta la muerte del trabajador, a través de un comunicado, donde manifiesta que esta noticia es una «tragedia totalmente evitable», y que se suma a las diez víctimas mortales ocurridas desde principios de año en el ámbito laboral de la Comunidad. Para COOO se trata de «un dato altamente preocupante» que tiene que provocar la «inmediata adopción» de medidas para evitar estas situaciones.

El secretario de Acción Sindical y Salud Laboral de Comisiones Obreras de Castilla y León, Fernando Fraile, quiere hacer un llamamiento público a todas las partes relacionadas con la siniestralidad laboral para tomar medidas de inmediato encaminadas a poner coto a esta sangría. «Se trata de cifras vergonzosas, que ponen de manifiesto una cruda realidad laboral en la que se favorece las cadenas de subcontratación, la precariedad laboral y la permisividad administrativa. Todo ello favorece que los empresarios opten más por sortear la Ley de Prevención de Riesgos Laborales que cumplirla», señala.

De los diez accidentes mortales, la mayoría de ellos se hubieran podido prevenir ya que cinco corresponden a lesiones no traumáticas, como infartos e ictus, daños relacionados directamente con la organización del trabajo y el estrés, uno ha sido por aplastamiento, otro por atrapamiento y tres accidentes ‘in itinere’ mortales. Poniendo de manifiesto una siniestralidad originada por la ineficacia o inexistencia de unas condiciones de seguridad razonables.

En lo que llevamos de 2022 se han producido un total de 4.406 accidentes de trabajo, 21 accidentes menos que en el mismo periodo del año pasado, de los cuales 4.369 han sido leves, 27 graves y 10 personas trabajadoras han fallecido en accidente laboral. La elevada cifra de siniestros nos depara 4.020 accidentes en jornada laboral y 386 ‘in itinere’, 3 de los cuales fueron mortales. Uno más que en el mismo periodo de 2020, lo que supone un incremento de los accidentes mortales ‘in itinere’ del 50%.

Por sectores de la actividad se aprecia un ascenso de siniestralidad generalizado en todos ellos, a excepción de la Industria, donde desciende un 12.49%. Es decir, se han reducido en 141 accidentes. El sector Agrario es el que acumula un mayor incremento, con un 20,60%, seguido del sector Construcción, con un 18.31%, y el de Servicios, con un 7.31%, que en el mismo periodo de 2021. Esto supone una subida de 48 accidentes más en el sector Agropecuario, 93 más en el sector Construcción y 147 accidentes más en el sector Servicios.

Ejemplo de esta situación son las jornadas interminables de trabajo, a las cuales las personas trabajadoras se ven sometidas con total impunidad. «Esto se debe, entre otras causas, a la falta generalizada de la implantación de un sistema de control horario objetivo y eficiente de la jornada, entre las pymes y micropymes que conforman mayoritariamente el tejido empresarial de Castilla y León», remarca Fraile Sanz. Para añadir que «es necesario hacer un llamamiento férreo a la responsabilidad de los empresarios, para que cumplan con lo legalmente establecido con el control horario en aras de reducir la lacra que es la siniestralidad Laboral».

En cualquier caso se trata de «una auténtica tragedia», en palabras del representante sindical, puesto que muchos de ellos se podrían haber evitado con un mayor compromiso por parte de los empresarios con la seguridad y la salud de las personas trabajadoras. Sin olvidar una adecuada y estricta vigilancia del cumplimiento de la normativa por parte de las diferentes administraciones y organismos con competencias en prevención de riesgos laborales.