Un niño de dos años ha fallecido el pasado sábado 23 de julio en el Hospital Clínico de Valladolid tras atragantarse por ingerir frutos secos. El pequeño Simón, natural de la localidad palentina de Baltanás, sufrió una parada cardiorrespiratoria y estuvo ingresado durante 48 horas en la UCI de la unidad de Pediatría. A pesar de que los sanitarios de Valladolid intentaron reanimarlo, no pudo superarlo y terminó perdiendo la vida.
El episodio se produjo el pasado jueves 21 de julio en un domicilio en el municipio de Baltanás cuando el Servicio de Emergencias 112 fue alertado para atender a un menor de edad por atragantamiento. A su llegada, el persona sanitario consiguió reanimarle pero tuvo que ser trasladado al centro hospitalario de la capital vallisoletana para seguir en observación. Durante las siguientes horas, todos los cuidados estaban centrados en salvar la vida a Simón, que finalmente no pudo superar la parada cardiorrespiratoria por tener cuerpos extraños en las vías respiratorias.
La localidad de Baltanás recibió sobrecogida la noticia de la muerte de este vecino tan pequeño y no se podían terminar de creer la tragedia que estaban sufriendo. Precisamente, el Ayuntamiento de la localidad palentina canceló todas las actividades previstas para ese 23 de julio tras conocer el «triste episodio» con un mensaje de condolencias a su familia: «D.E.P pequeño superhéroe».
