El Grupo Municipal Socialista ha detallado sus ejes de las alegaciones ante la ordenanza municipal del nuevo equipo de Gobierno que contempla la supresión de los carriles específicos para ciclistas y los carriles habilitados para autobuses y taxis. Precisamente, el plazo de alegaciones finaliza este 20 de septiembre para así recoger las formulaciones y reclamaciones ante el Plan de Movilidad que plantean PP y Vox en la ciudad vallisoletana. En este sentido, el PSOE ha centrado sus preocupaciones en la protección de la salud de los vallisoletanos, la mejora del medio ambiente, la seguridad vial y la apuesta de la movilidad sostenible, al tiempo que han denunciado nuevamente que la derogación parcial y modificación de dicha ordenanza supondrá «un grave retroceso en los avances logrados en materia de movilidad sostenible en nuestra ciudad».
El PSOE destaca los resultados positivos conseguidos con las medidas puestas en marcha en la anterior legislatura municipal, que han permitido reducir el volumen de tráfico de la ciudad y aumentar el uso de medios más sostenibles, como el autobús o la bicicleta, que ha aumentado en un 32% con respecto a 2022, según los datos de los aforadores del propio Ayuntamiento. En esta línea, los socialistas también señalan que se han reducido en un 8% los desplazamientos en vehículo privado con respecto a 2019.
«La ampliación del viario para el vehículo privado que implicaría la derogación o modificación de esta Ordenanza en los términos planteados tendrá múltiples consecuencias negativas para la ciudad y sus habitantes», recuerda el Grupo Municipal Socialista quienes también han señalado los problemas que se generarían en la capital. Entre ellos, el incremento de la congestión de tráfico, un mayor riesgo para los usuarios vulnerables, el incremento de los problemas de salud y deterioro de la calidad del aire o el aumento del tiempo de respuesta de los vehículos de emergencia.
En las alegaciones del PSOE en el Ayuntamiento de Valladolid también figura una advertencia, y es que creen que «la ciudad podría sufrir una pérdida económica significativa, ya que este cambio en la movilidad pondrá en riesgo la posibilidad de recibir futuros fondos de la UE». «La propuesta del equipo de gobierno es contraria a varias normas de ámbito estatal, como la de la Ley de Economía sostenible; a planes contra el Cambio Climático y de impulso al Medio Ambiente. Y también choca en el ámbito europeo contra varias normativas», recalcan desde el PSOE de Valladolid.
«Resulta evidente que el objetivo de la derogación no es un modelo de convivencia entre los diferentes modos de movilidad. Ni mejora la movilidad peatonal ni la movilidad en transporte público colectivo», denuncian desde el Grupo Municipal Socialista quienes además instan al equipo de Gobierno en base a los argumentos expuestos en las alegaciones a «reconsiderar su decisión porque perjudica el interés general».
